Selva Negra 2. Saint Lary Soulon - Conques

La primera noche en la caravana ha sido fantástica. Hemos dormido de un tirón sin ruidos, sin echar de menos el colchón, como en nuestra casa.
Después de ir a Saint Lary a comprar algunas cosas que nos faltaban cogimos la caravana rumbo a Conques. Pero antes de subir detectamos una perdida de aire en una de las ruedas traseras. Ya notamos que estaba muy baja antes de salir y cuando revisamos las presiones dónde arreglamos el aire acondicionado, pero las inflamos y listo
Miramos la rueda con un poco de atención y vimos un enorme clavo en la banda de rodadura. Por tanto tocaba buscar un sitio donde reparar el pinchazo lo más cerca posible. Tras inflarla en una gasolinera, encontramos un taller cercano pero nos dijeron que no arreglaban autocaravanas aunque nos indicaron un concesionario de Renault donde nos dijeron que lo harían. Nos dirigimos hacia él, que estaba en el pueblo de al lado, y después de estar hablando cómo podíamos con el francés de concesionario, el tío se puso a hablar en un perfecto español. ¡Ya podía haber empezado antes!
Pero había un problema. El taller cerraba a las 12, y eran las 12, y nos preguntaron si teníamos pensado quedarnos a comer en el pueblo y que ya nos la arreglan van a las 14. Con nuestra mejor sonrisa le dijimos que teníamos intención de seguir hacia Conques lo antes posible pues el pinchazo no sabía retrasado mucho. Sin desbordar simpatía, pero de forma eficiente, arreglaron la rueda en un momento y pudimos salir hacia nuestro destino. Eran las 12:30 y salíamos con casi 3 horas de retraso hacia Conques, nuestro destino.
Así como el primer día casi toda el recorrido transcurrió por autopista, en esta jornada no la pisamos. Carreteras de curvas de las que marca 90 km/h pero con la caravana es imposible ir a más de 70 km/h transcurrían por unos preciosos bosques y valles de la región de la Occitania francesa.
A las 3, nuestra hora de comer no la francesa, llegamos a Cordes-sur-Ciel, una preciosidad de pueblo con un castillo situado en lo alto de una colina. Comimos en un área de autocaravanas y después fuimos a dar una vuelta por el pueblo. El pueblo es un entorno medieval lleno de pequeñas tiendas de artesanía y arte. Muy bonito. Cuando llegue a casa y tenga tiempo pondré fotos.
Con bastante retraso salimos hacia Conques y la carretera se hizo mucho más complicada. Mantener 50 km/h era casi un milagro. Hicimos otra parada en Najac, uno de los considerados pueblos más bonitos de Francia. Pero ya andábamos mal de tiempo y no pudimos ir al castillo que se veía espectacular desde el pueblo, pero a un importante paseo. Ir con la caravana era imposible.
Debido al retraso, decidimos saltarnos la siguiente escala en Belcastell. Seguramente nunca volveremos a pasar por aquí pero alargar más la llegada podía hacer complicado encontrar un sitio para acampar
Por fin sobre las 9 llegamos a nuestro destino. Las señales nos guiaron a un gran parking en la que dudamos si la zona de caravanas era una u otra. Finalmente decidimos por pasar la noche en el parking normal. Ocupamos cinco plazas, pero estaba vacío, así que...
Era tarde para ir a ver el pueblo, pero dimos una pequeña vuelta y descubrimos lo que para mí es el pueblo más bonito que he visto en mi vida. Para mañana por la mañana queda dar una vuelta en el pueblo, lo que supondrá salir de nuevo tarde pero bueno, es lo que hay.