Lozoya - Chorrera de San Mamés - Lozoya

Más que interesante ruta por tierras del Alto Lozoya en época otoñal, que hace que estén los árboles de hoja caduca especialmente bonitos y de esos en esta zona abundan.

Los principales atractivos de la ruta son, sin duda, la visita a la Chorrera de San Mamés, el roble centenario catalogado como árbol singular de la Comunidad de Madrid que hay unos 80 m. por debajo de la pista del Camino de la Gutierra, pasado el arroyo de la Mata del Tirón, la vista a la quesería San Mamés y el precioso camino que separa las localidades de Navarredonda y Lozoya, como decía anteriormente ahora, en otoño.

El inicio de la ruta es bastante duro, empieza con unas rampas fuertes que te pillan frío. Es un camino alternativo al tradicional por la pista, más complicado y duro pero que a cambio ofrece unas vistas muy bonitas del valle del Lozoya, el sabinar y el embalse de Pinilla y un recorrido más natural entre robles.

Una vez enlaza con la pista ya el resto de la ruta se hará por buenas pistas exceptuando el tramos de la Chorrera que no es ciclable. La Chorrera de San Mamés es un lugar digno de visitar. No es espectacular pero desde luego que merece la pena acercarse a verlo.

Una de las cosas que más me sorprendió de esta zona fue la cantidad de pino silvestre que hay repoblado. No exagero si digo que me recordó al Pinar de Valsaín.

No podemos o no deberíamos perdernos la visita a la quesería San Mamés. Ya no sólo porque el queso que hacen está muy bueno y es artesanal, sino porque puedes aprovechar para hacer un pequeño avituallamiento pues te dan a probar sus distintas variedades de queso. Yo desde luego me llevé uno. 18€ para el que le interese.

Y por último el camino que va desde Navarredonda hasta Lozoya es un paraíso en otoño.

Si al final tenéis tiempo yo os aconsejaría una visita al sabinar que hay en la ladera sur del monte del Cahaparral.

Ojo con el agua pues no vimos ninguna más que en los pueblos.

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