12-09-22 Saja, Haya Corva-Infierno.(Bici) Cantabria

Por la carretera que va desde Cabezón de la Sal a Espinilla, pasado el pueblo de Saja llegaremos en el coche hasta el aparcadero de Haya Corva. En este punto iniciamos la ruta en bicicleta bajando durante unos kilómetros por la carretera hasta llegar a un desvío a la derecha donde arranca la pista de Collaceo que nos llevará en continua ascensión pasando por el refugio de Braña Espinas a salir a Ozcaba. Salimos de nuevo a la carretera muy cerca de la Venta de Tajahierro donde hacemos un alto para reponer fuerzas. La subida ha sido larga pero tendida en un espléndido día de bienvenida al otoño. Seguimos un rato por la carretera y cogeremos una pista a la derecha que sube hacia el collado de Sejos. Otra subida larga, más dura al principio que nos llevará al refugio de los Culeros. Seguimos subiendo dando vista a nuestra izquierda la caseta del Campanario y llegados al collado nos queda descender por buena pista hasta la confluencia de los arroyos Guariza, Diablo y arroyo de la Corva cuyas aguas dan origen al nacimiento del río Saja y donde nos dimos un refrescante baño. Un lugar precioso para descansar y comer para enfrentarnos a la complicada bajada de la Canal del Infierno. Atravesamos el puente sobre el río continuando por la pista que lleva al collado de Sejos pero la abandonamos al poco tiempo para seguir por una pradería y comenzar el dencenso junto al Saja. En la parte alta el sendero discurre junto al río y hay que hacer varios porteos pues apenas cabe la bici y hay pedruscos que impiden pedalear. Hay que vadear el río buscando el mejor camino. Todo es un poco aventura. Llega un momento que nos vamos encajonando poco a poco en la canal del Infierno. El camino es pedregoso y complicado. Dependiendo de la habilidad de cada uno en el manejo de la bicicleta, del riesgo que se quiera asumir, del estado de frenos y cubiertas (muy importante) se podrá bajar más o menos tiempo "dando pedales". Nosotros calculamos una ciclabilidad del 80 % en el tramo. La bajada para que nadie se lleve a engaño es complicada y en el caso de tener que cargar con la bici estamos hablando de un descenso en torno a 6 Kms. Llegados a Tramborríos y Pozo del Amo la pista mejora considerablemente y se llega hasta el punto de origen sin grandes dificultades. Toda la excursión es preciosa especialmente este último tramo que recomendamos a todos aquellos que les guste disfrutar de la NATURALEZA con mayúsculas. Andando se puede disfrutar incluso más que en la bici pues ésta te obliga a ir muy pendiente de por donde rodar.