Torrelaguna - Patones de Arriba- Patones de Abajo - Torremocha del Jarama

Ruta 068 Nucaban: Torrelaguna - Patones de Arriba- Patones de Abajo - Torremocha del Jarama

RUTA EL AMA DE DON QUIJOTE

Es primavera y los Caballeros de NUCABAN están eufóricos con la llegada del buen tiempo. Inician el recorrido en la rotonda que hay cerca del polideportivo municipal y la parada del autobús 197.
Van dejando a su izquierda restos de lo que en su tiempo fue una muralla defensiva de la población, al poco se llega a una fuente de agua potable, (si se quiere no es necesario venir cargado con agua), se toma la calle La Majalina que nos lleva definitivamente al campo.
Vemos al fondo, a media montaña, el Sifón de Matachivos del Canal de Isabel II, pero antes hay que hacer una subida tremenda. Se empiezan a escuchar las primeras quejas de los aguerridos caballeros que intentan un pequeño motín cuando pasado dicho sifón, al lado de una torreta de la luz, tomamos un camino de bajada a la derecha en dirección a un pequeño arroyo. Dicho motín es atajado con celeridad por los responsables y no ha lugar a más quejas, de momento.
Como no olvidamos que estamos en la sierra, el camino es sinuoso y con subidas y bajadas constantes. Llega el momento de iniciar otra tremenda subida a la izquierda por el GR-10, hasta llegar a un otero desde donde se aprecia la hermosura del paisaje. Discurre el camino entre enebros, brezos, romero florecido y jaras que aún no han roto la flor. La suave brisa mueve las flores que desprenden los olores que a este humilde servidor le recuerda tiempos pretéritos en la tierra que le vio nacer, en la Vera.
De nuevo intento de críticas al capi por el trazado exigente de la ruta, que no han lugar porque todos toman con sumo agrado las viandas procedentes de Extremadura que el aspirante a caballero nos hace como regalo de su deseado nombramiento.
Aún nos queda lo peor, bajamos una hermosa pendiente, entre la vegetación que poco a poco se va regenerando después de un pavoroso incendio, cruzamos un arroyo de agua cristalina e iniciamos la subida final que una vez coronada nos permitirá ver el pueblo de Patones. No nos extraña que sarracenos o gabachos ni se enteraran de su existencia.
El camino es angosto y bastante mal tratado por inconscientes “moteros” que arrasan con sus monturas de ruedas de tacos todo cuanto de bueno haya, rompiendo la paz y sosiego de un lugar paradisíaco, que la mala educación de unos o el servilismo de otros, los políticos que ceden a la presión de las grandes marcas de dichos vehículos y no hacen nada por mantener como se debe lugares únicos como este. MOTOS Y BICICLETAS A LA CARRETERA, LOS CAMINOS DE TIERRA PARA QUIEN VAMOS A PIE.
Tras la no menos dificultosa bajada, nos encontramos una antigua era, lugar que es el elegido por nuestra aspirante a ser nombrado caballero de este grupo de valientes, para realizar la ceremonia. Remitimos al video que está en Youtube a todo aquel que esté interesado en conocer dicho acontecimiento.
Este pueblo se limita a restaurantes y algún hotel. Nos da la sensación que no hay nadie y que salvo algún pijo o bohemio, no hay muchos más que vivan por aquí continuamente.
Desde aquí parte el PRM 14 y la Senda Genaro o GR 300, que no lleva a cumbres más altas. Pero nuestra meta está un poco más abajo, en el punto de partida. Para lo cual, tras beber agua en la fuente y cargar de nuevo las cantimploras, nos disponemos a tomar la “Senda Patonera”, desde la M-912 y una vez pasado el arco que forman los tubos del Canal de Isabel II. Por dicha senda, bastante bien conservada, llegamos a Patones de Abajo. El calor aprieta y nos refrescamos en el Bar Manolo, que somos atendidos por la camarera tan profesional como simpática y guapa.
Sin tiempo que perder nos dirigimos al Canal de Cabarrús que aún conserva parte de su inicial trazado, puentes de piedra y casas de los guardas, que aunque derruidas dan testimonio de su existencia.
Muy felices se las prometen los caballeros andantes, que han dejado la Vía Pecuaria dando un giro de 90º a la derecha para dirigirse a Torremocha del Jarama, por toda la llana y fértil vega.
El grupo va disperso y así cruza Torremocha del Jarama, dejando a la derecha la Iglesia y unas tinajas que manan agua no potable y por la calles de Uceda y Madrid salen de nuevo al campo.
Se divisa en lontananza un rebaño de ovejas y poco a poco al lugar nos dirigimos, como aún no acaban las sorpresas, es necesario subir una cuesta, que dado el cansancio acumulado y el calor de la media tarde se nos antoja bastante fuerte. Saludamos al pastor e inmediatamente tomamos a la izquierda durante unos metros para terminar coronando y girar de nuevo a la derecha. El grupo que va en cabeza observa gozoso la meta, que aun quedando trecho, nos alegra y reconforta. El camino viene sembrado de caballeros rezagados, escuderos, mozos de cuadra y aspirantes, que en su día serán nombrados, como hoy lo fue el novicio.
Ruta muy bonita que termina en el mismo que empezó y recomendable sobre todo para otoño y primavera. Con hermosas vistas, historia y todo lo que pueda pedir un deportista que practique senderismo.


Transporte utilizado: Se realiza justo en la última parada de Torrelaguna en el autobús 197. Este autobús tiene su cabecera en el intercambiador de Plaza Castilla. La vuelta en el mismo autobús, al ser una ruta circular.

Tiempo total: 5h 53'
Tiempo en movimiento: 4h 13'
Tiempo parado: 1h 40'
Velocidad media total: 3 km/h
Velocidad media movimiento: 4,1 km/h

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