Camino de Santiago Francés por Aragón. Etapa 3: Jaca - Arrés

Larga y monótona la etapa de hoy, aunque muy bonita, rodeada de montañas y campos cerealistas.

Salimos de Jaca sin dificultad, siguiendo las indicaciones que nos sacan de la ciudad por un camino con buenas vistas a la derecha, donde vemos, a media distancia, el bonito Puente de San Miguel sobre nuestro compañero de camio, el río Aragón.

Pasamos ante el cementerio y la Ermita de la Victoria para continuar nuestra marcha. En la jornada de hoy tendremos aye cruzar la carretera un puñado de veces, así que mucha precaución.

Y es que, más que el río, nuestra fiel compañera es la N-240, aunque durante un buen trecho caminaremos a cierta distancia de ella por un agradable bosque.

El primer bloque de la etapa de hoy son quince kilómetros hasta Santa Cilia. Mi intención era tomar algo aquí, pero el único bar estaba cerrado. Santa Cilia tiene albergue, y además pinta bien, pero se me hubiera quedado una etapa demasiado corta. Me conformo con ver la iglesia y el palacio, que están juntos, y continuó la caminata.

El plan de ahora consiste en desviarme levemente a Puente la Reina para pegar un bocado, pero antes de llegar me topo con el Bar Restaurante El Bosque, que pertenece a un complejo vacacional, así que es aquí donde me detengo unos minutos a reponer fuerzas.

Sólo quedan unos seis kilómetros de etapa, y tras dejar atrás Puente la Reina, donde no llego a entrar, bajo por carretera en dirección Arrés. Me la encuentro en obras, pero permiten el paso a peregrinos, al menos en la fase actual de dichas obras. Esto también ha afectado al enlace con la senda de subida a Arrés, pero se ha habilitado acceso, así que sin problema.

Afrontamos ahora lo más duro del día, la ascensión a Arrés. Y es que debemos salvar un desnivel de unos cien metros, acumulado casi todo en el primer tramo del sendero.

Sin embargo, las vistas compensan el esfuerzo, que por otro lado tampoco es particularmente exigente. Una vez arriba decrece la pendiente y nos damos un paseo casi llaneando por este hermoso balcón natural.

Arrés emerge a la vista casi de improviso, y es una aldehuela montañera de manual. El albergue se encuentra justo en la desembocadura del sendero. Es de donativo, y el hospitalero (voluntario) nos enseñará la torre y la iglesia. Hay cena y desayuno comunitarios.

También hay un bar restaurante para comer, tomar un café, etcétera.

Mañana, cuando baje del pueblo, lo podré ver en perspectiva, ya que se encuentra ocupando un cerro, pero como sólo lo he visto en primer plano no tengo la imagen completa.