Sierra Gorda de Loja: Loja-Nacimiento de Manzanil-Charco del Nevazo-Mirador del Karst-Cueva Horadada-Charco del Negro

Vamos en coche hasta Loja, y la ruta consiste en una circular por la Sierra Gorda de Loja, que nos presenta un paisaje totalmente fascinante.
Comenzamos la ruta saliendo hacia el sureste de Loja, y pasando por debajo de la autovia, rapidamente llegamos al Nacimiento de las Pasaderas o nacimiento del rio Manzanil. Comenzamos a carrilear entre cortijos y fincas de olivos, pero siempre en suave ascenso, por el camino de San Jose, para seguir por la Vereda de Panes y Cueva de las Abejas, hasta llegar a la primera cantera de piedra de las muchas que nos encontramos por el camino. Llegamos a un cortijo donde nos llama la atencion una gran colonia de pavos y de gallinas campando libremente por los alrededores.
Comenzamos la ascension propiamente dicha a Sierra Gorda donde desaparecen todos los arboles y nos encontramos un lapiaz inmenso, pero el carril por el que vamos que da acceso a las canteras se encuentra en buen estado, su trabajo le ha debido costar. Vamos encontrando gran cantidad de rebaños de cabras y ovejas con sus rediles correspondientes y al tomar altura vamos viendo balsas de agua artificiales y los primeros lagos naturales, en los altiplanos donde ya empieza a haber zonas cultivadas, asi como aljibes y zonas de abrevadero para los animales. Llegamos a Charco Nevazo una laguna natural en un altiplano con tierra agricola cultivada sobre los 1.300 metros.
Seguimos subiendo sobre los 1.600 metros de altura y vamos al Mirador del Karst, donde tenemos una bonita vista aerea del poniente granadino y la provincia de Malaga, divisando Fuente Camacho, Archidona, la Peña de los Enamorados, etc. y cuya llegada por una pasalela de madera por encima del lapiaz intransitable es muy caracteristica y bonita.
Volvemos por el mismo camino entre los molinos de viento y visitamos Cueva Horadada. Comenzamos a bajar y pasamos por la Charca del Negro, con sus famosos gallipatos, que logicamente no los vemos, pero suponemos que estan. Y comenzamos el descenso vertiginoso sin paradas hasta llegar a Loja