Tour Cienfuegos: Boulevard y Malecón

El recorrido lo comenzamos junto a la estatua de Benny Moré, debido a la importancia de este personaje para la ciudad. Moré fue un músico autodidacta, compositor, cantante y director sin estudios musicales ni de ningún tipo, que pasó de la pobreza a ser un personaje de reconocido prestigio a nivel internacional.

Apodado como el "Bárbaro del ritmo", era conocido por su innato sentido musical, dotado por una fluida voz de tenor, y por ser maestro en todos los géneros de música cubana, destacando en son montuno, mambo y bolero. Representado con el bastón cruzado bajo el brazo para que no se lo robasen, la.mano en el bolsillo pues era dado a repartir con sus compatriotas todo lo que tenía, y por ser un alcohólico empedernido, hecho que le llevó a la muerte por una cirrosis hepática.

Continuamos directo hacia le Boulevard San Fernando, llamado así en honor a Fernando VII de España, donde se encuentra la calle más comercial y establecimientos emblemáticos, como el restaurante La Verja, abierto por dos hijos criollos de españoles, donde se dice que tiene origen esta tradición criolla...

Aquí tenemos además la única tienda con capacidad para estar acondicionada todo el año a pesar de los apagones, con motivo de mantener los puros y cigarros en buen estado. Además aquí nos contaron que el famoso ron Bacardi, al irse la familia de Cuba, los propios cubanos se quedaron con las fábricas y barricas, y pasaron a continuar con la producción del mismo ron, bajo la patente y nombre ron Santiago de Cuba.

Un poco más adelante nos encontramos con las vías del antiguo ferrocarril de Cienfuegos, que nos recuerda que el primer ferrocarril en "España" fue inaugurado en Cuba, concretamente en 1837 en la Habana, en la época colonial, siendo este que nos ocupa inaugurado en 1851, cuando en la propia península de España el primero fue inaugurado en 1844.

Justo a mano derecha de las vías nos encontramos con el hotel La Unión, mandado construir en 1869 por el prestamista/esclavista Tomas Terry. Se dice que hizo fortuna comprando esclavos negros desnutridos y enfermos a precios irrisorios, para llevarlos a sus fincas, donde los cuidaba y alimentaba para después venderlos por una fortuna, y que con estos beneficios pasó a constituirse en prestamista, amasando una enorme fortuna de hasta 25 millones de dólares de la época.

El hotel esconde grandes sorpresas, además de la historia de su fundador, como fotos de antiguos clientes tales como José Raúl Capablanca, el primer cubano campeón mundial de ajedrez. Además tiene dos bonitos patios de corte andaluz, una piscina donde (TIP) relajarse por 800 pesos (600 destinados a consumo de bebidas) o por 200 pesos solo d entrada negociados con el personal.

Pero lo más destacado es su azotea, pues nos ofrece una de las mejores vistas de la ciudad, apreciando el malecón, el mar, los ríos, los bidones azules, las distintas fábricas, la torre de la que iba a ser la central nuclear del país, así como la plaza de José Martí.

También se ve al fondo varios rascacielos, cuyas viviendas pertenecen por orden estatal a los trabajadores de la industria de Cienfuegos, por unos precios subvencionados y acordes al salario de cada individuo, en torno a un 15% del mismo, con opción a comprarlo cuando se termine de pagar el precio fijado con las mensualidades de la renta.

Nuestra próxima parada es la plaza o parque de José Martí. Como Cienfuegos fue fundada por franceses, cuenta con la estructura que exigía la norma, es decir, una plaza con su iglesia, ayuntamiento, teatro y aduana, si bien esta última, por practicidad, se asentó unas cuadras más alejadas, frente al mar.

En el suelo de la plaza tenemos el Acta de Fundación de la ciudad, además de varios bustos y la estatua del sempiterno José Martí en el centro presidiendo.

Esta plaza además cuenta con la peculiaridad de tener el único Arco del Triunfo, junto con el de Barcelona, de carácter civil y no militar, pues fue un regalo de los obreros y pueblo de Cienfuegos a la ciudad por la implantación y éxito de la República del 20 de Mayo de 1902.

Continuamos para ver el Centro Mercantil, hoy bar del estado, local que guarda en su interior la primera bandera tejida de Cienfuegos, además de un teléfono antiguo. Este último es para hacer alusión a que, según cuentan, el verdadero inventor del teléfono fue un italiano llamado Antonio Meucci, y que dicho invento lo llevo a cabo en Cuba. Llamo a su invento el teletrofono, rebautizado después por Alexander Graham Bell en 1876. Este "robo" del invento se produjo debido a la mala fortuna del italiano, quién no podía permitirse lagar la patente por 250$, por lo que pagaba 20$ anuales por una especie de reserva de la misma, y cuando quebró su compañía y su mujer tubo que vender sus inventos para salir del paso, ya fue demasiado tarde, y el estadounidense se hizo con su invento y lo patentó.

Seguimos el tour visitando el árbol más viejo de la ciudad, que se encuentra frente a la anteriormente citada aduana, un centenario árbol conocido como el Mal Amigo, un Hagüy Macho, igualmente llamado Árbol de la ingratitud y la traición, debido a que engulle todo lo que pilla por su paso, como la palma que en pocos años quedará oculta por su enorme abrazo. Curioso es que todos los días sale a saludar un camaleón de vivos colores en el árbol.

En esta ocasión acabamos el tour/paseo en el muelle real, donde a mano izquierda tenemos los pilares de madera del antiguo muelle usado para mercancías, y a mano derecha el nuevo, tras el Covid y las restricciones de EEUU a terceros que negocien con Cuba, prácticamente en desuso también. Es un buen lugar para tomar algo y pasear.

Esta zona del muelle es además las zona más sucia de la ciudad, pues es en esta pequeña bahía donde desagüan todavía los residuos y necesidades de los residentes de la zona antigua en protesta de lo cual hay una obra de una virgen hecha de basuras en uno de los viejos pilares.

Aquí terminaría la zona boulevard, si bien el tour completo habría que seguir por el paseo del Prado al.completo y finalizando en la punta sur del malecón, algo que hicimos el día anterior.

El Paseo del Prado de la ciudad de Cienfuegos (Calle 37) va desde el río El Inglés hasta Punta Gorda, siendo la calle más larga de su clase en todo Cuba.

El paseo está flanqueado por interesantes edificios neoclásicos y columnas de color pastel.

En 1819, el núcleo original de la Colonia de Fernandina de Jagua, compuesto por 25 manzanas alrededor de la Plaza de Armas, actual Parque José Martí, se extendía por el Este hasta la calle de Hourruitiner. Ya en 1825 la parcelación abarcaba hasta el referido Paseo, que aparece trazado de Norte a Sur, por Esteban Famada (agrimensor público), desde la calle de Castillo (avenida 62) hasta una ensenada situada al Sur de la calle de Santa Clara.

En torno al Paseo del Prado se ubican numerosas construcciones de gran valor cultural e histórico. Entre ellas se encuentran la Casona de los Leones, cuya entrada está protegida por dos estatuas de estos animales, la Biblioteca Provincial Roberto García Valdés, el majestuoso Obispado, y numerosas residencias que guardan las reminiscencias de un pasado de opulencia y bienestar, con amplios balcones y suntuosos portales. Edificaciones exponentes del eclecticismo arquitectónico prevaleciente en la localidad, donde armonizan los estilos mudéjar y bizantino con el veneciano, el gótico y el barroco.

Por su parte, el Malecón comienza en el propio Paseo del Prado y termina en el área de Punta Gorda. Coloridos edificios, espigadas palmeras y el eterno Caribe, hacen de este paseo, una fiel reproducción del imaginario colectivo sobre la bella Cuba.

El Malecón es básicamente un muro de contención del mar, lo que en España se conoce como paseo marítimo. En esta zona de la ciudad se celebran diferentes fiestas, como los famosos carnavales cienfuegueros.

El recorrido culmina con la joya arquitectónica del Palacio del Valle, inspirado en la arquitectura árabe española,.y a la que los.cubanos llaman como su pequeña Alhambra cubana.