Pinturas rupestres en el barranco del Mascún. Abrigo Palomera y Cueva Pacencia

En esta ruta nos desplazamos hasta Rodellar, un pueblecito de 49 habitantes perteneciente al municipio de Bierge y a las puertas del Parque Natural Sierra de Guara, para contemplar algunas de sus mas significativas pinturas rupestres, admirar su paisaje protegido y darnos un baño en una de las muchas pozas que podremos encontrar a lo largo del Rio Mascun.

Dejaremos el coche en el parking publico que se encuentra a la entrada del pueblo, nos dirigiremos hacia la iglesia y seguiremos el camino dejándola a la derecha, continuaremos por el camino hacia el refugio "Kalandraka" y lo dejaremos a la izquierda. Empezaremos a bajar al barranco hasta encontrar un desvío a pocos metros y tomaremos el camino de la izquierda, el cual nos llevara hasta el abrigo de Palomera, donde veremos anclada a la pared una reja que protege las pinturas. El acceso, se lleva a cabo a través de una escalera de unos dos metros, recomendable si se va con niños subirla con supervisión de un adulto.

Estas pinturas datan de alrededor del 3.000 AC, y son una buena representación del estilo denominado "Arte esquemático postpaleolítico" desarrollado durante el periodo de la Edad del Bronce de la Península ibérica. En este abrigo hay muestras de antropomorfos esquemáticos que son representaciones de figuras humanas.

Regresamos de vuelta hasta el desvío y continuamos bajando al fondo del barranco, a continuación seguimos aguas arriba cruzando el riachuelo un par de veces hasta llegar a una pradera con vistas a la cueva Pacencia.

El acceso a esta zona es más complicado, ya que hay que cruzar el río con densa vegetación y echar las manos por un terreno delicado con peligro de caída para acceder a la repisa desde la cual se pueden ver las pinturas.

Estas pinturas fueron encontradas en el año 1991 por Juan Antonio Cuchí, y se encuentran en la parte izquierda de la cueva. Hay 9 sectores con pinturas, que engloban antropomorfos de tipo ancoriforme (en forma de ancla), digitaciones y una representación bastante deteriorada que se interpreta como un cuadrúpedo.

Si el tiempo acompaña y tenéis tiempo, no os podéis ir de la zona sin dar un paseo por el barranco y tomaros un rato de relax en una de sus múltiples pozas que invitan a darse un chapuzón. El pueblo cuenta con servicios de alojamiento, restauración y empresas de multiaventura.

Si quieres ampliar información sobre las pinturas:

Ayuso P., Painaud A. Pinturas esquemáticas en Rodellar (Huesca). Revista Arqueología nº 194. Junio 1997.

Painaud A., Ayuso P., Calvo Mª J., Baldellou V. Pinturas rupestres en el barranco del Mascún (Rodellar - Huesca).Bolskan nº 11 - 1994.(https://dialnet.unirioja.es/descarga/articulo/125031.pdf)