Paseo vespertino por el Valle de Tena: Circular al Embalse y pueblo de Lanuza desde Sallent de Gállego

El itinerario por el Camino Natural del embalse de Lanuza nos ofrece bonitas panorámicas del embalse, a pesar de que hoy daba pena por lo seco que estaba.
Durante el recorrido podremos disfrutar de una de las estampas más clásicas y conocidas del valle de Tena: el embalse en primer término, Sallent de Gállego y la majestuosa Peña Foratata al fondo. Pero este también es un buen itinerario para conocer con tranquilidad la vegetación de la zona y relajarnos en las diversas zonas de descanso que encontraremos a lo largo del camino.

La ida se realiza por carretera hasta el pequeño pueblo de Lanuza, para luego regresar por la presa enlazando con Sallent de Gállego mediante el precioso camino natural.

El embalse recoge las aguas del río Gállego, afluente del Ebro, además de las de otros pequeños arroyos y torrentes descendientes de las montañas aledañas. Su presa fue inaugurada en 1980 y permite embalsar una capacidad total de 16,86 hm³ de agua. Con su construcción quedaron anegadas 114 hectáreas de terreno dedicadas principalmente a pastos, además de una parte del núcleo urbano de Lanuza, localidad que dio nombre al embalse. El pueblo se deshabitó en 1978 aunque, afortunadamente, en los últimos años se han ido recuperando parte de las casas y se ha creado hasta un hotel.

Para los amantes de la naturaleza, el valle de Tena ofrece infinidad de alternativas: recorrer senderos señalizados, realizar todo tipo de actividades de aventura, o simplemente descansar en sus numerosos miradores.

El Valle de Tena ofrece además actividades náuticas, actividades culturales, el Festival Internacional de las Culturas, balnearios, exposiciones, museos y la Ruta del Serrablo que, con punto de partida en Biescas, recorre iglesias mozárabes y románicas de los siglos X y XI.