DOCK POINT TRAIL - KENAI FJIORDS NATIONAL PARK - VALDEZ - ALASKA

Marcha realizada el miércoles 29 de julio de 2015
AVISO: Se entiende, que todo aquel que quiera realizar esta misma ruta, asume la responsabilidad que conlleva una actividad no exenta de posibles riesgos o incidentes, en un entorno en el que el sentido común y las circunstancias pueden marcar la diferencia entre pasar un buen día o todo lo contrario.
Nuestro plan inicial era el haber hecho por la mañana el Mineral Creek trail, pero por diversos motivos no pudimos y nos vimos obligados a cambiar de planes. De ahí, que finalmente hiciéramos por la mañana el Solomon Lake trail, que resultó ser un paseo algo más corto de lo que pensábamos. Nos pareció buena idea continuar por la tarde recorriendo el entorno de Valdez, para ver la bahía y la ubicación de este bonito enclave desde otra perspectiva, y por ese motivo esa misma tarde salimos de Valdez por la Harbor Dr., pues al final de ésta calle que recorre buena parte del puerto, se encuentra el pequeño aparcamiento y área de recreo, desde la que parte este corto pero coqueto trekking. Nada más empezar este trail, y como siempre el letrero informativo de rigor, así como la cancela que evita el paso de vehículos a motor. Este pequeño brazo de la bahía de Valdez, se encuentra orientado de oeste a este, por lo que coincidirá con el rumbo que llevaremos inicialmente, al menos hasta la mitad del recorrido cuando haya que volver. La ida conlleva algo más de setecientos metros, que se van haciendo todo el tiempo sin desniveles destacables, pues transcurre paralelo a otra pequeña bahía, en la que en ese momento la marea baja ha retraído las frías aguas del océano Pacífico. A los doscientos metros de este corto tramo inicial, vemos el cruce, con el camino de bajada por el que volveremos del Dock Point. Y es durante este recorrido de vuelta cuando podemos tener mejores vistas de la bahía Valdez, no sólo por la orientación que ahora llevamos, sino porque también hemos ido subiendo lo suficiente para ver desde cierta altura el puerto y la población de Valdez. Es en este tramo de vuelta en el que se han habilitado unos cuantos miradores de madera, con pasarelas que los unen, para evitar en época de lluvia el terreno pantanoso de unos cuantos tramos de este trecho. El recorrido se ha ido estrechando, hasta convertirse en un sendero, que nada más pasar el último mirador empieza a descender bruscamente, salvando en unos pocos metros, el desnivel que habíamos ido ganando en el recodo final de la ida de esta pequeña península. Como el recorrido total, incluidas fotos y tertulias no ha ido más allá de la hora, aún nos queda tiempo para volver a visitar el interesante museo de Valdez, que no sólo tiene como encanto su gratuidad, sino la gran cantidad de cosas expuestas para ver, en un espacio tan pequeño como el que ocupa en una sala única.