230814-Cañete-Ruta: 8A “Las Fuentes“

Caz de agua- Vadillo

Restos del viejo Caz que regaba la parte alta de la Vegatilla, excavado en la misma roca

El Vadillo- aireadores canalización de agua

Fuente del “Chorro” y puerta de La Virgen

Fuente de agua no tratada de excelente sabor y frescor, el manantial se encuentra en las proximidades del puente del viejo molino harinero de San Roque hoy en día reconstruido. Este mismo manantial abastece de agua la fuente de la Plaza Mayor. La Puerta de la Virgen es una de las tres entradas de acceso a la población en el interior del recinto amurallado de origen árabe del Siglo X, daba acceso a las vegas del Oeste, también a los camino que comunicaban a los pueblos de la cuenca alta del río Guadazaón y por lógica a la ciudad de Cuenca.

Interseccion 'Camino de Las Fuentes'

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Intersección- 'Camino Ronda del Castillo' Oeste

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Molino de Sant Roque

Recuperada no hace mucho tiempo, la vieja y ruinosa edificación del viejo molino harinero de San Roque luce hoy su bonita silueta en un entorno de película, fue uno de los tres molinos que disponía la población.

Puerta de San Bartolomé

Esta puerta al igual que las de “Las Eras” es de Ingeniería musulmana acodada, también del Siglo X. Orientada al Norte, inició de caminos que comunicaban con los castillos de Huelamo, Bétera y Albarracin El nombre de San Bartolomé, hace referencia a una ermita que existía en las proximidades del recinto amurallado.

Surgencia I de las Fuentes

En este entorno el río mana agua durante todo el año y río abajo va ganando caudal hasta su desembocadura en el río Mayor del Molinillo.

Surgencia II de Las Fuentes

Cuando el acuífero del subsuelo está saturado de agua, esta mana abundantemente caudal en este punto y era aprovechado para el riego de las tierras paralelas al camino por dónde hemos venido.

'El Nacimiento' Arroyo de las Fuentes

Lugar donde en 1962 en la surgencia principal del “arroyo de las Fuentes” (I.G.N.) o río “Tinte” - “La Virgen” nombre popular, se captaba el agua para suministro de agua de boca para la población de Cañete, en periodos de abundancia de lluvias es una gozada ver y oír el murmullo del agua, donde los más valientes nos remojamos las piernas en sus frías aguas.