Montaña de Puzol (Alfinach): Muntanya Negra, Barranc del diable y el Picaio

Recorrido por la parte más oriental de la calderona: las montañas de Puzol.
Saldremos de la explanada al norte de Alfinach, ya lindando con la ladera de la montaña. Empezamos remontando el Barranc del Llop hasta encontrarnos con el GR10 que se guiremos en sentido ascendente hasta justo después de superar los últimos campos de naranjas (abandonado).
Tomamos aquí, a la derecha, la Senda del Cocodrilo, que al poco pasa al pie de un resalte rocoso donde podremos observar, sobre nuestras cabezas, una curiosa roca con forma de cabeza de cocodrilo.
Seguimos subiendo y alcanzamos una zona llana donde encontraremos dos bonitos "cucos" o casetas de piedra seca. La senda sigue en ligero ascenso hasta alcanzar la pista que lleva al Santurari de la Milagrosa. La cruzamos y seguimos por una estrecha senda que trepa por el cortafuegos bajo un pequeño tendido eléctrico que da servicio a las antenas a las que nos dirigimos.
Una vez en las antenas, las rodeamos y cogemos una estrecha senda que baja, cruza la carretera y continúa hasta salir a Claro de Luna.
Aquí, una nueva senda nos baja rápidamente a la zona de naranjos del Racó de Gausa, cuyo perímetro seguiremos al pie de la ladera de la Muntanya Negra hasta la explanada que la separa de la colina de Pardalot.
Continuamos al pie de la ladera, cambiando de dirección. Hay que estar atentos, en un punto determinado, no muy evidente, hay que trepar por el talud de tierra roja y salir a una estrecha senda que discurre sobre la pista. La seguimos hacia la derecha, casi en dirección contraria de por donde veníamos, pero unos metros por encima. Al poco salimos a una zona pelada bajo una torre de la luz y giramos a la izquierda para iniciar el ascenso a la montaña que acabamos de rodear: la Muntanya Negra. Tenemos magníficas vistas sobre el Racó de Gausa, a la derecha (lástima el ruido de la autopista) y sobre el Barranc del Diable, a la izquierda.
Pasamos junto a un resalte rocoso que forma un balcón sobre el Barranc del Diable, con el Picaio justo enfrente y llegamos, después de rodear otro resalte rocoso, a una expalanada donde cogemos la senda de la izquierda. Al poco salimos a otra senda y vovlemos a girar a la izquierda para descender por el Barranc de Diable, pasando bajo el abrigo de las pinturas rupestres (que hoy no visitaremos) y llegamos casi hasta el final, muy cerca de donde iniciamos el ascenso a la Muntanya Negra.
Empieza aquí la subida estrella de la jornada: La subida al Picaio por el espolón, por empinados escarpes, alguna trepada y, sobre todo, terreno solitario y con bonitas vistas.
Una vez en la cumbre bajamos al Santurari de la Milagrosa y luego por el zigzag del viacrucis hasta su base.
Cerca del final del viacrucis, tomamos una estrecha senda a la derecha que recorre la ladera en diagonal, cruza un pequeño barranco, tras el que hay un pequeño tramo en subida, y continúa bajando hasta enlazar con el GR10, que seguiremos a la derecha.
Al rato salimos a los campos abandonados de naranjas por donde pasamos al principio. Sólo nos queda seguir el Barranc del Llop en descenso hasta llegar al punto de partida.