Cerro Redondo, Incamayo.

Un cerro del que había oído hablar y visto fotos, ybque hace rato quería hacer.
Arranqué 7.15 todavía de noche. Dejé el vehículo al costado de la ruta, cerca del puente (desde donde comienza el track) porque no había otro lugar. La verdad que no sé si es la mejor opción, pero no me quedó otra, y por suerte no pasó nada.
Bajé por el puente y comencé a costear un alambrado, hasta que no tuve más remedio que cruzarlo para poder tomar la senda. El primer kilómetro es una subida en zig zag muy empinada, que conviene tomarla con calma. Se gana altura muy rápidamente.
Una vez arriba se comienza a subir pero ya por el filo del cordón montañoso.
Hay una "senda principal", que es más ancha y que es la que utilicé para subir. Al bajar, se puede tomar los "desvios" hacia la izquierda que evitan que tengamos que subir al vicio, juntándose siempre con la senda principal más adelante. Y al subir, también se pueden tomar esos "atajos" que siempre se hacen con sendas alternativas hacia la derecha, para evitar subidas más empinadas que te hacen pasar por las famosas "falsas cumbres" que leí en alguna crónica de un usuario de Wikiloc.
Se sube en forma constante.
Algunas subidas son bastante empinadas.
Luego del km 6, se sigue subiendo pero el paisaje cambia por pastizales de altura, donde pude ver cóndores y perdices.
A esa altura las nubes ya habían hecho un hermoso colchón que cubría hacia Campo Quijano y el Valle de Lerma.
Después del km 9, lugar donde hay una pequeña antena y panel solar, se comienza a bajar durante un km para si encarar el último kilómetro con una subida de pendiente pronunciada, que termina en la cima del Cerro Redondo, donde llegué a las 10.25 hs., donde me quedé poco tiempo porque el viento estaba fuerte y muy frio.
La subida es exigente durante mas de 11 km así que tengan eso en cuenta porque la bajada también lo es.
Durante el trayecto se pueden ver los Cerros Pacuy, Grande, Gólgota, Malcante, Nevado de Cachi y Acay y a lo lejos hacia el Norte, uno con algo de nieve que calculo sería el Chañi, pero no estoy seguro.
Por último, ya en la base, si bien se veía que el sendero seguía hacia la ruta, al no conocer, hice lo mismo que al inicio, o sea, crucé el alambrado de una propiedad privada, crucé el lecho del río y llegué a la ruta, a donde había dejado el vehículo.
La verdad, una salida sin desperdicio que se hizo esperar pero vale la pena hacer, si te gusta este tipo de actividad.