Erg El Güera - Tissint

Parece que el rallie se ha acabado por la zona y no se ven nubes de polvo en la dirección que vamos.
Aprovechamos y nos quitamos el mal rollo de ayer con tanto coche y recorremos lo que queda del Cheggaga en modo divertido (la arena siempre puede serlo).
El lago Iriki está solitario. No se ve a nadia. Ni siquiera el Titanic parece abierto. Pero bueno, aprovechamos y pisamos un poco que también es divertido.
Alcanzamos pronto el control militar. El papeleo no lleva mucho. Y nos metemos en la vieja pista del Dakar, una vieja conocida ya.
Sobre el mediodía , la sombra de una gran acacia en nuestro camino nos recuerda que ya es hora de tomar algo. Queda poco para atravesar la pista que va a Foum Zgui.
Ya falta poco para que veamos de nuevo el río Draa. Un viejo puesto militar, ahora en semiruina, nos recuerda que estamos en zona complicada.
A nuestro paso aparece un cauce pequeño que cuenta en su orilla con un espacio muy apropiado para vivaquear , pero hoy vamos bien de hora.
Cuando aparece en el cerro un destacamento militar , es la señal que el río Maleh esta ya cerca y que en su orilla, tenemos que hacer un alto en el puesto de control.
Allí nos dan la mala noticia. Pista a Tata, prohibida; hay que tomar la pista a Tissint. Pues nada, nos quedamos sin río, por el momento.
Seguramente será la contrariedad del momento que, cuando estamos a muy pocos kilómetros de la carretera, aparecen dudas sobre si estamos sobre la pista correcta. El GPS parece decir que no y las ortofotos no ayudan mucho. Que si esta, que si aquella... al final optamos por una pista que parece ir por la otra orilla del río y que termina en Tissint.
Después de hacer un poco de campo a través y de circular un poco por la pista en cuestión, creo reconocer un pozo y unos corrales que vemos a nuestro paso. Compruebo la pista mejor, la sigo muchos kilómetros en dirección contraria y compruebo con horror que es una que cruza un reg que ya los militares nos hicieron cruzar en 2019 cuando llegamos a un punto prohibido camino también de Tissint. Yo la llamé Pista Infernal y esta es su prima hermana.
En fin, gajes del oficio. Llegamos a Tissint temprano, a tiempo de tomarnos un té en la plaza del pueblo antes de salir para Tata con la intención de pasar la noche allí.