Puebla de Lillo. Subida al Susarón por el cuchillo de la cara Este.

Cada vez que miro este pico me acuerdo de la manzanilla que me daban de pequeño cuando me dolía la barriga.
La ruta parte de la carretera unos 2Km antes de llegar a Puebla de Lillo (desde León). Muy cerca hay un desvío en la carretera dónde se puede aparcar el coche, como referencia hay un silo y un cartel informativo.
No es una ruta de senderismo porque hay que ir casi todo el rato escalando por piedras. No es apta para gente que tenga vértigo o que le den miedo las alturas o que ande un poco torpe o bajo de forma porque vas por el cuchillo con acantilado por ambas partes y trepando todo el rato. Imprescindible botas altas con muy buena suela, que agarre mucho, y no recomiendo hacerlo con la roca humeda porque estará resbaladiza.
Entre el track y los hitos de piedra que hay de tanto en tanto y un poco de instinto para ir eligiendo tu la ruta se puede seguir sin dificultad.
Las vistas desde la cima tremendas, ves los Mampodres el Yordas y el pantano de Vegamián.
La bajada es por la cara contraria, por una vereda que está bastante marcada por el tránsito que tiene y además también tiene hitos de piedra. Vas bajando haciendo unas zz, no tiene pérdida.
Hay una fuente pero tiene muy poquita agua en la base del Susarón así que ir bien aprovisionados.
La vuelta por el hayedo es una auténtica preciosidad, hay que mencionarlo también porque forma parte de la ruta y a nosotros nos encantó.
En Puebla de Lillo imprescindible ver el torreón medieval (solo cuesta 1€) y tienes bares y restaurantes para merendar y hacer ronda (hay mas ambiente que en el húmedo), incluso puedes ir sin el bocata para la ruta porque te lo hacen allí y a unos precios muy económicos (a mi me gusta el de la carretera al lado de la plaza).