Peña Negra, Cerró del Porro y el Pando de Becenes desde Polvoredo

Hoy tocaba descubrir un rincón poco frecuentado de la montaña leonesa. Son muchas las veces que he realizado rutas por la zona de Riaño, pero esta zona no la conocía aún. Sí que había hecho cumbres muy cercanas, como Peña Ten, pero este valle y este pueblo no lo conocía.

Partiendo del pueblo de pólvora y tu fuimos rumbo norte por el camino del medio. Fuera del pueblo continuamos hasta el fondo del valle, pasando por una zona estrecha previamente, donde desechamos un camino que nos llevaría al puerto Zalambrar.

Llevamos un refugio muy bien cuidado, me imagino que de algún particular de la zona, y desde ahí ya abandonamos el camino y comenzamos a ascender por el cauce de un río que no tenía apenas agua hasta llegar a el Collado de Jian, donde las vistas eran impresionantes. Desde aquí solo no restaban unos pocos metros para hacer la primera de las cumbres, muy aérea en su cima, el Pan de Becenes o Pico Burricayo. Tras disfrutar de esta pequeña cumbre, descendimos de nuevo al Collado, y desde aquí continuamos campo a través rumbo nor-oeste para coronar la segunda cumbre, el Cerro del Porro. Descendimos para llegar a la collada la boya que le separa de peña negra. Ya solo nos quedaba superar un fuerte, pero corto desnivel para hacer la cumbre más importante del día, peña negra. Las vistas desde aquí son formidables. Y la caída hacia el norte es muy abismal. Decidimos hacer la ruta circular, y continuar rumbo oeste hacia la collada de Valdemagan, donde aprovechamos a comer. El descenso lo realizamos por el arroyo Valagar, que apenas tenía agua. Hay sendas de ganado paralelas al río por si tuviera agua. Enlazamos con el camino qué desciende desde Arcenorio, y ya solo tocaba continuar este camino para llegar al pueblo.

Resumen, una ruta muy entretenida, subiendo 3 cumbres, con unas vistas excepcionales de la zona de Sajambre y el macizo oriental de los picos de Europa, con zonas de senda y campo a través, y que hará las delicias de muchos montañeros.