2012-02-04 Cortijo Quejigales, Cañada Cuerno, Puerto Pilones, Pozos Nieve, Torrecilla, Cañada Ánimas, Cortijo Quejigales

4 de febrero de 2012. Día soleado; viento fuerte y muy frío.

A TENER EN CUENTA
Agradecimientos
Marcha organizada por la Agrupación Deportiva Rutas.

Recorrido
Parte del recorrido por terreno cubierto por una delgada capa de nieve sobre placas de hielo.

Esfuerzo físico
IBP = 124 HKG

Catálogos
Otras rutas por la Cordillera Penibética.

DESCRIPCIÓN
Cortijo de los Quejigales. Comenzamos a caminar hacia el nordeste por el carril del Sabinal que, en este tramo, discurre en paralelo al cauce de la Cañada del Cuerno (queda a nuestra derecha).
Franqueamos la cadena que impide el paso de vehículos.
Dejando el carril por la derecha, un puente de madera nos ayuda a cruzar sobre el lecho helado de la Cañada del Cuerno.
Iniciamos un suave ascenso que nos introduce en el pinar.
El sendero se estrecha y zigzaguea para remontar la mayor inclinación del terreno. Al poco encontramos los primeros pinsapos.
Poco después el sendero penetra de lleno en el pinsapar de la cañada del Cuerno.
En la cota de 1.570 metros, bifurcación: vamos por el ramal derecho (la senda de la izquierda, que NO debemos tomar, se dirige hacia la cañada de Enmedio).
Poco antes de alcanzar el Puerto de Pilones pasamos junto a un pinsapo aislado cuya forma es peculiar, pues carece de ramas en el tercio medio de su copa.
Desembocamos en el carril de Pilones, que tomamos hacia la izquierda para alcanzar el cercano Puerto de Pilones. Al frente vemos la antena de telecomunicaciones donde finaliza el carril de Pilones.
Continuando unos pocos metros por el carril de Pilones alcanzamos una bifurcación: abandonando el carril tomamos el ramal derecho, un estrecho sendero que va dejando a nuestra izquierda la antena.
Caminamos por un terreno alomado, alternando suaves subidas y bajadas, entre vetustos quejigos de montaña: es el quejigal de Tolox y la zona por donde se extiende es conocida como meseta de Quejigales o de Tolox.
Alcanzamos la zona del Puerto del Oso. Inmediatamente, a nuestra izquierda, se abre una pequeña depresión en cuyo centro se encuentra el pozo de nieve de Tolox.
Proseguimos caminando en la misma dirección que traíamos para, al poco, dar con una bifurcación: vamos por el sendero de la derecha, encaminándonos hacia el Torrecilla.
A la izquierda del camino queda la sima TO-8.
Llegamos al pilar de Tolox, con fuente, pilón y virgen dentro de una hornacina.
Un poco más adelante encontramos otro pilón y, por encima de él, dentro de una oquedad natural, la decapitada estatua de Santa María de la Victoria.
El sendero acomete ahora la empinada subida al Torrecilla. Como las pisadas de quienes subieron antes que nosotros han eliminado la fina capa de nieve, dejando al descubierto placas de hielo, optamos por abandonar el sendero y dirigirnos, abriendo huella por nieve virgen, hacia el Puerto de los Valientes. Antes de llegar a él, girando a derechas (sur) subimos hasta la cordal, por la que seguimos hacia el suroeste para alcanzar la...
Cumbre del Torrecilla. Desandando nuestros últimos pasos iniciamos el descenso por la cordal, llegando por ella, esta vez sí, hasta el...
Puerto de los Valientes. Girando a izquierdas tomamos rumbo oeste para volver al...
Pilón situado bajo la estatua de Santa María de la Victoria. Continuando con el regreso deshacemos camino hasta llegar al...
Puerto del Oso. Girando a derechas bajamos junto al pozo de nieve de Tolox y, continuando de frente, subimos un suave repecho. Enlazamos así con un senderillo que nos llevará por la Cañada de las Ánimas, donde tendremos que estar atentos a los hitos que jalonan el sendero para no perderlo.
El sendero vira a izquierdas, descendiendo ligeramente por la parte alta de la cañada y pasando junto a algunos pinsapos jóvenes.
Al poco, cuando la ladera por la que caminamos no nos estorba para ver hacia nuestra izquierda, divisamos en lontananza la antena de Pilones.
Poco después llegamos a una bifurcación: vamos por la derecha, en brusco descenso, acercándonos con rapidez al pinsapar de la Cañada de las Ánimas, espeso bosque que atravesaremos con rumbo predominantemente norte. Debemos ir buscando los hitos de piedra que marcan el sendero a seguir, complementados en algunas zonas con marcas de pintura azul, ya que el pinsapar de las Ánimas es un bosque muy denso en el cual es fácil desorientarse.
El sendero gira a izquierdas, tomando rumbo oeste y dando por finalizado el acusado descenso. Al poco el bosque se aclara y, a nuestra derecha, podemos contemplar: el Peñón de los Enamorados, en la parte más alta; el Tajo del Canalizo, en el centro; y en la parte más baja, el Peñón de Ronda.
Poco después, saliendo del pinsapar de las Ánimas desembocamos en un camino de trazado perpendicular a aquél por el que venimos y que tomaremos hacia la izquierda (suroeste).
Pero antes nos acercamos a un mirador natural, distante unos 20 metros, que es conocido como Los Coloraíllos debido al color rojizo de las rocas que encontramos en él. Para ello atravesamos el camino en el que acabamos de desembocar, siguiendo la dirección que traíamos por el sendero que baja desde las Ánimas. Desde el mirador podemos ver el Peñón de los Enamorados, el Tajo del Canalizo, el Peñón de Ronda, el pinsapar de las Ánimas, el pinsapar de los Hoyos de la Caridad, la Sierra Hidalga y la Sierra de Grazalema.
Regresando al camino nos encaminamos por él hacia el suroeste, en un trazado con suaves subidas y bajadas. A nuestra izquierda podemos ver la parte baja de la Cañada de Enmedio, con su pinsapar aferrándose a las rocas de pequeños tajos.
El camino se transforma en carril, por el que proseguimos nuestro descenso.
A la izquierda quedan las ruinas de la casa del guarda forestal Frasquito Molina y, junto a ellas, una placa conmemorativa adosada a una roca. Unos metros más abajo, a nuestra derecha, se halla la fuente del Pinar, también conocida como fuente de Molina.
Llegando al puerto del Quejigal el carril por el que venimos enlaza con el carril del Sabinal, que tomamos a izquierdas. Al poco entramos en el pinar.
Bifurcación: de frente, ramal izquierdo (el carril que sube por la derecha se dirige a una balsa contra incendios).
Dejando a nuestra izquierda el puente de madera, por el que al poco de comenzar nuestro recorrido cruzamos la Cañada del Cuerno, proseguimos de frente, franqueamos la cadena que corta el carril al tráfico rodado y regresamos al...
Cortijo de los Quejigales, punto final de nuestro itinerario.