Tunel de los Anguijes por la vía verde y regreso por el salobral, aguas nuevas y casa Juarez

Primera etapa de toma de contacto tras mi operación de hernia inguinal.





Ni que decir tiene que tanto el compañero Adolfo como un servidor hemos ido de paseo, a un ritmo de unos 20-22 km/h a la ida, por la vía verde y unos 22-24 a la vuelta por caminos y carreteras secundarias.
Gracias a Adolfo por acompañarme, porque al no ir solo he ido mucho más tranquilo por si pasaba algo, o me resentía de la operación.
De la operación que me hicieron hace solo 10 días y de su raja de 11 grapas de longitud, ni me he acordao en toda la etapa, pero las piernas de vez en cuando se quejaban tras haber estado de reposo toda la semana. No puede ser, hay que darles cera que se acomodan, se ponen de acuerdo con la barriga y esto es un desastre.
Pinchazo en plena vía verde, con dos puntas de cardo en la rueda trasera ¿? Eso es mala suerte…
Hemos seguido la vía verde hasta que se termina a la altura de El salobral, y de una perforada que estaba en mantenimiento y con una gran grúa sacaban los tubos tramo a tramo. Hay que seguir recto y buscar un gran árbol solitario para girar a la izquierda. Un par de cruces siempre en dirección a los Anguijes, pasamos frente a la casa La Florida y seguimos para llegar al trasvase Tajo- Segura. Como se han terminado los calores y las necesidades de agua en las huertas murcianas, el trasvase iba bajo, de las veces que más bajo lo he visto.
Hemos llegado al túnel y tirado las fotos de rigor, con un Adolfo que ha descubierto el sitio y como es normal le ha gustado e impresionado.

De regreso hemos improvisado un poco y en lugar de tomar de nuevo la vía verde hemos buscado El Salobral y Aguas Nuevas con idea de parar en sus fuentes para ir reponiendo agua. A la salida de Aguas Nuevas hemos tomado la carretera que pasa por Casa Juárez y entra a Albacete por el barrio San Pedro.
En definitiva nos ha salido una etapa rodadora que se hace en tres horas de paseo y buena charla con el compañero, como ha sido el caso, y en dos si uno aprieta, con el aliciente de ver el túnel de los Anguijes que siempre es impresionante.
Un placer compartir ruta con Adolfo. Como siempre digo, lo más importante de las salidas, son las personas.
¡A disfrutar¡