Senderos por Valsaín

Saliendo desde el aparcamiento del Pontón alto retrocedo por la carretera hacia Revenga hasta la entrada paralela a la acequia de Navalcaz y por su sendero paralelo llego hasta la cola del pantano. Al llegar al puente sin cruzarlo giro a la derecha ascendiendo los senderos del arroyo de Valparaiso hasta la carretera que lleva a la parte más alta de Valsaín. Desde allí decido meterme por la dehesa buscando sendero inexistente, error!!. Acabo en el puente de los canales, lo cruzo y asciendo por una senda hasta la carretera, la cruzo y entro en la zona del Ceneam, donde cojo agua y subo por el camino de la Fuente del Ratón hasta el cargadero en la mitad, donde se cruza el Arroyo de las Quebradas. Una vez cruzado por el puente de madera tomo el primer camino a la izquierda la senda del Arroyo de las Quebradas, bonita senda, dura en ascenso, de unos 2 km ciclables, salvo un tramo central de unos 100m con mucha piedra y pendiente, el segundo tramo es ciclable, aunque exigente.
Finalmente se llega a la pista asfaltada, descansamos del duro ascenso y tomamos en bajada rápida hasta el llano de la Cueva del Monje. 100m más abajo, al llegar a una piedra giramos a la derecha y cruzamos el arroyo de la Chorranca y de los Neveros para enlazar unas sendas llanas y rápidas cruzando la pista que lleva a la silla del Rey. Seguimos por senderos semi cubiertos de jara hasta llegar a la Fuente de la Plata o esquina SurOeste del Palacio y ahí tomamos una divertida y técnica senda paralela al arroyo del Rastrillo, cruzamos la pista a la altura del Puente Blanco y otros senderos estrechos y divertidos por La Cruz de la Pasión para volver al aserradero de Valsaín.
Cruzamos la carretera y por la parte de la presa bajamos al camino del Puente del Niño pero sin cruzar la puerta hacemos la herradura que bordea ese lado del pantano, hasta el puente sobre el Eresma y volvemos por la acequia de Navalcaz hasta el parking.
Ruta divertida, con mucha senda. Eliminar el paso por la dehesa de Valsaín por pasto. Parte dura el ascenso por el arroyo de las Quebradas hasta la pista, el resto delicia de conducción.