SEGUNDA PARTE DEL SOPLAO-Barcena Mayor-Cruz de Fuentes-Ezcaba-Negreo

Dejamos el coche en Renedo de Cabuérniga y nos dirigimos por carretera hasta Bárcena mayor, unos 13 kms de ligera pendiente hacia arriba para ir calentando piernas.

Uno poco antes de Bárcena, enganchamos el track del Soplao que viene desde la cumbre del Moral. Pasamos Barcena Mayor y comenzamos la ascensión a Cruz de Fuentes, puerto de cerca 18 kms, cota más larga de la prueba y tb la más alta.

Es una subida cómoda, si cómoda puede ser una subida de ese kilometraje. No tiene porcentajes muy duros pero, hay que ir dosificando porque a parte de algun falso llano y alguna bajadita, no te da tregua.

La primera parte transcurre al lado del rio, entre un bosque de hayas y robles espectacular en todos los sentidos. Detenerte a escuchar el silencio del bosque, roto sólo por los latidos de tu corazón desbocado del esfuerzo y algún otro pájaro no se paga con dinero.

La segunda parte es ya en las zonas más altas, donde el bosque da paso a la bien llamada montaña cántabra, con praderias enormes y verdes.

En la cima encontraras la famosa Cruz de Fuentes, un monolito enorme de piedra, una bifurcación de caminos y unas vista del puerto de Palombera infinitas.

Cogemos el camino de la derecha y descendemos por una senda amplia y bastante ciclable, eso si, sin confianzas por que piedras sueltas y tronchas hay.

Al acabar el descenso y sin avisar, comenzamos a subir Ezcaba, entre bosques frondosos y acompañados de vacas y caballos autóctonos. Subida no muy dura de unos 4 kms que nos lleva hasta el alto sin mucha dificultad. Cogemos el desvio hacia la derecha para continuar subiendo hacia la cumbre de la Venta vieja.

Una vez en la cumbre descendemos hacia Colsa, por un sendero amplio y en un estado más que aceptable, aunque con tramos de piedras sueltas, donde uno tampoco se puede lanzar mucho. Las vistas son impresionantes y a mitad de descenso ya divisamos los pueblos de Colsa y Los Tojos, con unas maravillosas vistas al fonde del alto del Moral y montañas aledañas.

Al llegar a Colsa enganchamos carretera asfaltada en un descenso super divertido por vueltas y revueltas hasta llegar a la carretera general que une Bárcena y Correpoco.

Una vez en Correpoco, cogemos el desvio marcado a la derecha donde se inicia el camino hacia Llendemozó. Para mi este tramo sobra, ya que trancurre por una especie de calzada romana super incómoda, con piedra enormes y en la que prácticamente es imposible ciclar, de hecho, la única caida que tube ese día fue en ese tramo y, poner algo así casi llegando al final de la prueba, sólo puede traer lesiones y averias que den por traste mucho timepo de entreno y muchas ilusiones. He de decir que este tramo se hizo en seco, no quiero ni imaginar que puede ser con barro.

Este rompe bici-piernas nos lleva hasta Renedo de Cabuérniga. En este punto se inicia la subida al punto más temible de la ruta, el monte Negreo.

Se trata de una subida con inicio de sus primeros 250-300 metros duros, en torno al 16-18%, teniendo luego rampas cementadas de unos 50 metros de al menos 20% y algún tramo del 28%. Subida de unos 5 kms que tardé en subir casi hora y media. Dura, bastante dura, no quiero ni pensar que puede ser con 130 kms en las piernas y los desniveles que se gastan.

La bajada se hace por pistas bastante cómodas pero sin confiarse, hay tramos con trampas que pueden hacerte besar el suelo. Después una pequeña subida de 2 kms del collado de Carmona y ya se desciende sin problemas hasta la carretera que lleva a Ruente rumbo a Cabezón, pero yo, en este caso, a la derecha unos 8 kms para llegar a Renedo para finalizar la etapa y coger el coche de vuelta a casa.

Etapa preciosa en su recorrido, salvo algún tramo, bastante cómoda y, teniendo un nivel medio y con tiempo, bastante asequible de hacer. Llegué bastante cansado, eso si.