SAN FERNANDO DE HENARES -CERCEDILLA

Mi primera ruta con los Mahou Killers ya es historia y, ahí queda en la memoria.
Carlos, Sergio, luís y Paco forman este elenco cervecero ciclista en el cual, su lema es, andar en bici para ir a beber cerveza. Me invitaron a salir con ellos y, con ellos me fuí.

La ruta consistía en llegar hasta Cercedilla, pueblo de la sierra de Madrid en el cual acababa este año la quedada anual que, por estas fechas, se hace por estas tierras madrileñas.

Salimos pronto de Coslada, dirección el estadio de la peineta donde ya enganchamos el anillociclista que rodea madrid.Los primeros kilómetros tranquilos, calentando y con las ilusiones y piernas intactas. Pasamos por Canillejas, Hortaleza y cerca ya d ela Moraleja dejamos atrás el anillo verde y poco apoco nos vamos alejando dela capital. Seguimos con buen ánimo y fuerzas, el agua nos respeta, no hace mucho frío, la cosa va bien.

Llegamos a Tres Cantos donde ya dejamos el asfalto del carril bici y la ruta empieza a tener un caríz más trialero. Por una senda estupenda de subidas y bajadas, sin mucha dificultad, llegamos hasta Colmenas Viejo en cuya estación de tren hacemos una parada técnica de repostaje y evacuación.

Desde la estación cogemos una senda que transcurre paralela a la vía del tren, una paraje muy chulo por el cual, poco apoco nos vamos dentrando en la sierra de Madrid. Seguimos esta entrada a la sierra que nos llega hasta Manzanares del Real, en unos paisajes muy elegantes donde las fotos son obligadas.

Desde Manzanares empieza el último tramo de unos 23 kms de subida. Las piernas de los Mahou Killers, ciclistas de domingo, empiezan a pesar y, el último tramo, se antoja largo y complicado.

Pasamos Mataelpino y llegamos a el pueblo de Navacerrada. Este tramo es sin duda el más bonito de la ruta, por senderos estrechos de buen firme, entre bosques, ríos, etc.

Desde Navacerrada es ya descender hasta Cercedilla y llegar a la meta, cansados pero orgullosos de haber logrado el reto.Soís grandes Mahou Killers, pero hay que entrenar más e indultar alguna birra de vez en cuando.

Pa celebrarlo, logicamente unas más, unas raciones y tren de vuelta a casa.