Ruta Pamplona 5 dias. Etapa 1 Pamplona-Doneztebe

PAMPLONA - PAMPLONA. CIRCULAR DE 5 DIAS
Por fin llegó la fecha esperada, este año con el calendario mas avanzado que en años anteriores, lo que hace que las ganas se intensifiquen. Como novedad también, hemos podido coincidir un "pelotón" mas numeroso que en años anteriores. Vamos 5 personas y sabemos que 3 o 4 mas se han quedado con muchas ganas pero sin poder compaginar sus obligaciones con esta pequeña aventura.
Los integrantes de este pelotón somos (incluyendo la protección de datos): César, Carlos L, Carlos C, José Luis y Luis.
El miembro mas joven (César), tampoco podrá acompañarnos todos los dias, pero disfrutaremos con el, el fin de semana y el lunes que es San Isidro, fiesta en Madrid, su lugar de residencia y trabajo.
Nuestra ruta de este año es una circular Pamplona - Pamplona, con finales de etapa en por Doneztebe, Hondarribia, Donosti, Lekumberri y Pamplona, para realizar en 5 días, en principio sin agobios y con tiempo para poder disfrutar del recorrido y de los lugares donde dormiremos.

SÁBADO 13 DE MAYO. PAMPLONA-DONEZTEBE
Salimos de Zaragoza en dos grupos. Unos en autobús que sale a las 7 A.M. y otros en coche, que por solidaridad sale a la misma hora, para encontrarnos en Pamplona alrededor de las 10 A.M, almorzados y con todo preparado para empezar la ruta.

Salimos de Pamplona en dirección a Berriozar y por el monte de San Cristóbal y algún tramo de carretera con poco tráfico llegamos a Garciriain.

Después de pasar Usi, y tras atravesar unas cancelas, nos encontramos un camino en fuerte subida y después en fuerte bajada del 15% aproximadamente, de apenas 1,6 km, absolutamente embarrado que nos cuesta recorrerlo 50 minutos. El barro, mas bien arcilla, se pega a las ruedas y las bloquea de manera que no ruedan. Hay que arrastrar la bici, cargada con las alforjas e ir quitando barro con un palo cada pocos metros. ¡Que rabia da una bajada tan bonita y no poderse montar en la bici!. Se nos hace penoso y nos agota. Estamos en medio de un precioso bosque.
Por fin se acaba el tramo de arcilla y emprendemos descenso hacia Gaskue y Guelbenzu. Circulamos por el Bosque de Orgi y el Valle de Ulzama hasta Larraintzar y por carretera sin tráfico hasta Eltzaburu donde hacemos una parada para reponer fuerzas con los restos de bocata del almuerzo, algún plátano, y barritas energéticas.
Al volver a arrancar y en la duda hasta que se posiciona el GPS, un paisano nos pregunta a donde vamos. Nos indica el camino que llevábamos marcado en el track y en su explicación nos dice "y a la derecha el camino del barro". Nos preocupa la expresión después de la experiencia que acabamos de pasar.
Pedaleamos hacia el embalse de Leutza por un precioso bosque, en suave y continua subida durante 5 km en los que ganamos 160 m de desnivel y llegamos al giro del temido camino del barro. El suelo no es malo del todo, pero la pendiente es cada vez mas fuerte y tenemos que desmontar y practicar el "empujing". En los siguientes 2 km subimos 170m de desnivel. El paisaje parece sacado de un cuento y compensa el esfuerzo.
Por fin coronamos en la cota 916 y comienza el descenso. Primero por camino en buen estado, hasta que encontramos una pista hormigonada donde el descenso se convierte en espectacular con pendientes medias en tramos prolongados cercanos al kilómetro, del 20% y del 40% en alguna curva, según marca el GPS. Los frenos se calientan al rojo y dejan de ser efectivos, por lo que hay que partir la bajada para refrigerarlos y aprovechamos para reagruparnos.
Seguimos hacia Oitz y ya por carretera los 3 últimos kilómetros hasta Doneztebe. Llegamos al hostal que teníamos reservado y están celebrando una boda. Están con los cafés y las copas y no nos pueden hacer caso, así que preguntamos por una gasolinera cercana con lavado a presión y allá que nos dirigimos.
La consabida, ducha, cervezas y búsqueda de lugar para cenar. En el pequeño pueblo de 1700 habitantes, ha habido ese día una boda, bautizos y comuniones. Todo el pueblo está bebido y no es fácil encontrar un sitio medianamente tranquilo. Cenamos lo que encontramos, y a dormir.