Ruta del Quijote. Etapa 2 Villanueva de los Infantes a Ruidera (Ray2021)

ETAPA 2- VILLANUEVA DE LOS INFANTES...OSSA DE MONTIEL... LAGUNAS DE RUIDERA.... RUIDERA
Tras hacer noche en tan noble pueblo, nos apresuramos a ganar tiempo al sol por la mañana, pues aguardaba una ruta dura con un tramo hasta ossa de Montiel de más de 40 kms sin topar ninguna población en el camino...

Cargados de agua hasta los topes y con buen queso y jamón en las alforjas, viajaba además en la mochila de maese Pola la Bota "fortis Piscis" con vino de la mancha en su interior... por ello bien pertrechados para el camino salimos de Villanueva y pronto comenzaron los repechos camino de ossa de Montiel.
Nada que ver con la etapa previa. Así pronto atacamos un duro repecho que nos hizo vivir la realidad de la etapa que acabábamos de empezar, sin duda la más dura del camino. Tras pasar por la Casa del Don Pascual subimos duro repecho en busca de la casa del medico. Luego LLegamos bajando al cortijo de Fuenlabrada y tras vadear el río Azuer seguimos ruta en busca del Cortijo de Don Bosco, que seríamos donde haríamos avituallamiento.
Cruzamos el río Cañamares donde aprovechamos para darnos un baño improvisado. El solo pegaba ya fuerte y algunos repechos comenzaban a debilitar las fuerzas, llegamos al citado cortijo de Don Bosco ubicado en el km 98 de ruta global y 23 de la jornada.

Aprovechamos la sombra de sus altas paredes, para resguardarse del sol y sacar los manjares de la mochila, el rico queso y el buen jamón nos supieron a gloria, pero al tirar de la bota... un vino caliente cayó al gaznate y rápidamente se me subió al "celebro"... puff, menudo embotamiento... creí caer victima de un encantamiento al beber semejante pócima y provocó que durante un buen rato vagara más que pedaleara por los campos de la Mancha... irrigando la cabeza a cada poco con el agua de los bidones, viendo ya Ossa en lontananza, entramos abrasados por la calor en las calles de Montiel.

Buscamos rápido el único lugar que vimos abierto en la zona de la plaza y las cervezas comenzaron a desfilar por la mesa... NO encontramos en dicho pueblo ningún lugar abierto donde comer unas tapas... ello provocó junto con la "parquedad y hermetismo" de sus habitantes...; que fuera posiblemente uno de los pocos lugares que no nos dejaron buen sabor de boca. Así que salimos del pueblo en busca del paraje de la Cueva de Montesinos...
Salimos por asfalto del pueblo coronando a 953 mts de altura, uno de los puntos más altos de la ruta. Tras un tramo de asfalto, en una de las rotondas vimos una enorme bicicleta; pronto tomamos un camino favorable para el pedaleo en la zona de los Toconares.
Volvimos a enlazar transitoriamente con la carretera la cual abandonamos donde el monumento del Quijote. Y Allí se halla la cabaña donde sacar las entradas de la cueva de Montesinos.
En dicho lugar, se inicia la única bajada algo técnica de la ruta. la Cual nos acerca a la oquedad de la cueva de montesinos, donde reza en un panel las aventuras de Don Alonso Quijano y el encantamiento del mago Merlín, que mantenía atrapadas a 500 almas.

Seguimos bajando por un camino disfrutón, hasta llegar a las cercanías de la ermita de San Pedro de Verona. Alli tras dudar un poco el camino a seguir, al salir uno más técnico que nos introducía en el monte y sin las marcas nada claras de las balizas del camino del Quijote, decidimos seguir por sendero aledaño a las lagunas de Ruidera.
Iniciamos así un pedaleo agradable por angosto sendero aledaño a la laguna de San Pedro y que nos llevó luego a unirse con la laguna de la Tinaja. Comienza a aparecer gentío en la zona de las lagunas y nosotros a buscar un lugar donde poder bañarnos para combatir el incesante calor. Buscamos para ello un embarcadero donde pedimos autorización para bañarnos y disfrutar de un reconfortante baño en la laguna de San Pedro. Y tras ello para rehidratar en restaurante cercano.
Estábamos ya cerca de Ruidera, destino final de hoy, investigamos el inicio del camino que circunda por el monte las lagunas, y no lo vimos muy adecuado para ir tan cargados como ibamos, con taludes laterales de caida y un sendero muy estrecho entre arboleda, dificil de ciclar y maniobrar... sin alforjas otra gallo cantaría..así que primó el sentido común y volvimos al asfalto para continuar por el mismo hasta Ruidera,. Tramo final casi llano y sin ninguna complicación.
Arribamos bastante cansados en la ruta de hoy e hizimos noche en Hostal Restaurante la Mancha (creo que ahora no dan comidas, solo alojamiento), nos permitieron guardar las bicis en el comedor y tras paseo por el pueblo cenamos muy bien en el Victoria (la lado del Hotel).
Así concluyó la jornada más dura del camino...