Ruta de los tres castillos (Tiedra, Villavellid y Villalonso)

Iniciamos la ruta a los pies del castillo de Tiedra, junto al restaurante El Molino de Tiedra. Hicimos un breve recorrido por el pueblo y nos dirigimos a la cercana ermita de Nuestra Señora de Tiedra vieja. Desde allí descendimos hasta Pobladura de Sotierra. Salimos de esta localidad por un buen camino con varios altibajos que nos llevó hasta Castromembibre. Bordeamos el pueblo y continuamos hacia Villavellid. El último tramo, menos de un kilómetro, fue por carretera.

Nos acercamos a las inmediaciones de este castillo del siglo XV y fue una gran decepción porque lo intentamos por varios flancos y no hubo manera de acercarse a él ya que un gran perímetro alrededor del castillo está vallado. Eso sí, nos acercamos a las ruina de una bonita iglesia, pero en muy mal estado. Resultó llamarse iglesia de San Miguel y data del siglo XVI.

Salimos de Villavellid y, con continuas subidas y bajadas llegamos a Vezdemarbán. Allí vimos la iglesia de San Miguel y el santuario de Nuestra Señora de la Cuesta. Abandonamos Vezdemarbán y tras cambiar varias veces de dirección y realizar unos cuatro kilómetros llegamos a Pinilla de Toro. Desde allí, con tendencia descendente, fuimos hacia Villalonso. Salimos a la carretera que va hacia Pinilla y la continuamos hasta el propio Villalonso viendo su impresionante castillo a nuestra izquierda.

Atravesamos el pueblo y llegamos a los pies de este castillo, también del siglo XV, y en el que se rodaron escenas de la película Robin y Marian, en la que trabajaron Sean Connery y Audrey Hepburn. Nos hicimos una foto junto a él y salimos por pies porque al final la lluvia quiso acompañarnos.

Tomamos dirección Benafarces, que está muy cerquita. Llegamos a esta localidad y la atravesamos pasando también junto a su iglesia, que en los años 90 perdió la torre y parte de sus muros por un derrumbe, y por su Plaza Mayor. Tras salir del pueblo ya vimos el castillo de Tiedra justo frente a nosotros, así que nos quedaba poco, eso sí, todo el tramo fue un continuo y ligero ascenso culminado por una subida fuerte que, tras atravesar una especie de granja, nos dejó en el pueblo.