Riópar- Villaverde de Guadalimar. Vuelta al Padroncillo (Monte Pernales)

La salida de Riópar por la espléndida senda pegada al Río de Vega. Más adelante viramos a izquierdas dirección La Dehesa por carreterilla sin tráfico ganando altura poco a poco. Al tiempo por pista hasta un último cortijo, abandonado, y nace una senda, tan bonita como poco ciclable, en busca del Collado de Villaverde. Algún pateo antes de llegar a la divisoria y algún ostión gratuito😖 Luego del otro lado la senda algo mejor, y en bajada rápido ganamos el Cortijo de la Casica. Con la pista ancha y bien sentada la bajada se hace muy rápida junto al Arroyo de los Pajares, con sus cascadas y áreas recreativas.
Sin un plan claro, evitamos entrar en el camino que lleva a la Cruz del Pernales, y más abajo sí tomamos un desvío que lleva a media ladera de la impresionante mole del Padroncillo en busca de su cota más alta. Los cuestones de espanto y aún así continuamos venga arriba. Ganado por fin un collado empezamos a caer no muy pronunciado. Así un rato hasta al salir de una curva encontrarnos con un puertón flanqueado por dos enormes aguiluchos de piedra. Es una enorme finca de caza cerrada a cal y canto!! No tenemos otra que dar media vuelta. Algunos dátiles al buche y ahí que vamos de regreso a la pista principal para bajar a Villaverde de Guadalimar. Ya bien abajo tomamos un atajo y al poco la pista llena de agua y en la parte de abajo se une a un enorme brazo de agua. No tenemos otra más que cruzarlo, y lo hacemos a la brava, saliendo empapados hasta las rodillas.
Del otro lado enseguida entramos en Villaverde, buscamos el bar y nos preparan unos suculentos bocatas. El cafetito y seguimos camino.
Salimos del pueblo por asfalto y algo antes de entrar en la carretera que une RIópar y Siles tomamos una pista que sube paralela a la carretera. Bien chula junto al Arroyo, ganamos altura hasta salir sí o sí a la carretera dirección Puerto del Arenal. Le tiramos un rato, pasamos Cueva Ahumada y más adelante dejamos la brea y a derechas en busca del Cortijo de Tribaldos, donde hablamos con el actual dueño y recordamos tiempos pasados. Seguimos luego pegados a un arroyo y pronto el camino desaparece y decidimos tirarle zigzagueando fuera pista para ganar altura rápido en busca de un collado donde en mapa aparece marcada una senda. Aún nos queda un trecho cuesta arriba para acabar saliendo a una pista que en ligero descenso nos lleva directos al Puerto del Arenal.
Por estupenda senda a la carreterilla que nos lleva a Los Chorros, el Nacimiento del Río Mundo. Las fotos y deshacemos camino hasta la carretera, y justo un poco antes nace un fabuloso sendero que nos baja directos a La Casa de la Noguera y poco más abajo al punto de partida en Riópar.