Muelas del Pan-Bermillo de Alba-Muelas del Pan (por la Tierra del Pan, Aliste y Alba)

Salimos de Muelas de Pan. Desde allí cogimos un camino que va bordeando el embalse hasta la playa de Ricobayo (donde tuvimos un pequeño despiste con el GPS). Subimos hacia la carretera y tras pasar por debajo de la N-122 tomamos un camino a la izquierda que tras una ligera subida desciende bastante bordeando aún alguna cola del embalse. Pero enseguida tuvimos que ascender de nuevo una cuesta con una inclinación considerable y larga que, además, nos pilló fríos aún a todos.

Tras el duro inicio y tras llanear un poco, cruzamos la carretera de Villaflor y empezamos a descender hacia "El Sofreral", donde se concentran una gran cantidad de alcornoques. Tras la bonita bajada se empieza a subir lentamente hacia Cerezal de Aliste, recorriendo hasta esta localidad un tramo de camino muy atractivo.

Tras atravesar Cerezal tomamos unos metros la carretera de Videmala pero enseguida giramos a la izquierda para coger un camino que, de nuevo con muchos subes y bajas y con buenas vistas de la zona, nos condujo hasta Bermillo de Alba.

Ya en Bermillo tomamos una subida que inicia el camino de Videmala, que está en muy buenas condiciones pero lleno de toboganes. Desde Videmala nos dirigimos a la carretera de Villanueva de los Corchos, la seguimos un tramo para después desviarnos a la izquierda iniciando otras subida que nos condujo a más subes y bajas hasta llegar a las inmediaciones de esa localidad. Tras unos titubeos con el track llegamos a ella, y salimos de la misma con una subida endiablada que nos llevó a a la carretera que lleva a Villaflor.

Esta carretera nos condujo a esa localidad y ya en ella descendimos hasta la famosa barca. Tras la visita salimos del pueblo, no hace falta decir que subiendo, y ya en la carretera iniciamos una larga subida que abandonamos al finalizar la misma para coger un camino a la izquierda que poco después dejaríamos para coger uno a la derecha que nos llevó a una impresionante bajada tras la cual, como suele pasar, vino una enorme subida. Volvimos a descender siguiendo el camino y retomamos el que habíamos llevado a la salida que nos llevaría a Ricobayo, subieno, como no podía ser de otro modo.

Muy bonita ruta, pero de cierta dureza. Una auténtica "rompepiernas".