Mde - El chuscal - Ebejico - Heliconia

¿QUE HAY DETRÁS DE LOS CERROS OCCIDENTALES DE MEDELLIN?

A principio de este año, cuando nos dio por subir por San Antonio de Prado a las antenas del Padre Amaya, nos comentaron unos lugareños sobre un camino que conduce a Ebejico por un cruce de la cordillera a mas de 2300 msnm. En esa ocasión, tan solo nos indicaron que debíamos buscar la Finca la Puertas.

Yo tenía en mi mente desde niño, el recuerdo de Ebejico como un pueblo muy lejano, recuerdo que siempre que viajábamos hacia Santa Fe de Antioquia y después de descender del alto del boquerón, llegábamos a Palmitas y ahí estaba ese aviso que decía Desvío a Ebejico. Siempre sentí curiosidad de saber que hay detrás de las montañas que todos los dias vemos por el occidente de Medellin y sabia que en algún lugar de esos estaría Ebejico.

Así llego el fin de semana en el que una vez mas decidimos hacerle caso a la gente y salimos a buscar aventuras en las bicicletas.
Salimos ese sábado sin mucho afán y novedad, un poco tarde de lo acostumbrado ya que nos quedamos mas tiempo revisando las bicicletas, y como la salida sería desde la casa, uno se relaja mas y deja todo para ultima hora. Salimos como a las 8:00 rumbo Ebejico, La idea era tomar el cruce por la vía de San Antonio de Prado.

Subiendo, nos encontramos con otro ciclista que con cierta frecuencia recorre el lugar y nos advirtió de la dificultad del recorrido, aun asi seguimos subiendo mas emocionados aun por lo que nos esperaba, llegamos hasta San Antonio, tomamos la via hacia el alto del Chuscal pero 2 Km. antes de llegar, nos desviamos a la derecha para buscar la via que conduce a la planta de beneficio de Porcicarnes, una vez alli, seguimos el exigente ascenso, todo el camino era conocido aunque esta ves parecía que la inclinación de la carretera se hubiera curvado aun mas en contra nuestra, llegamos al desvío advertido y tomamos el camino del lado izquierdo para seguir el ascenso por entre un bosque de pinos y llegar al cruce de la cordillera.

Una vez en todo lo alto, alcanzamos un ascenso total de 1000 Mt. aproximadamente, preguntamos con es costumbre y nos advirtieron de lo lejos que nos encontrábamos de nuestro destino, como ya sabemos y estamos cada dia aprendiendo mas del lenguaje de los lugareños, preguntamos en términos de horas de caminada en vez de dejar la escueta pregunta que si estamos muy lejos. la respuesta que recibimos fue:
- Uyyyyyyyyyyyyyyy nosotros nos demoramos casi 4 horas en llegar. (traducido en términos mas cristianos, es tremendamente lejos)

Llegamos al borde del cerro casi a medio dia y recibimos la mejor recompensa... hay un paisaje increíble hacia el occidente. Pegado a la ladera occidental, se extiende un bosque andino de niebla, es un lugar muy lluvioso, se forman microclimas allí con los vientos que ascienden del valle del Cauca y se condensan en nubes precipitándose rápidamente justo antes de cruzar la cordillera. Debido a esto se forman bosques muy nutridos de vegetación nativa donde se forman las cuencas de rios y quebradas de aguas cristalinas un poco mas abajo, todo es de un color verde intenso, es como si alli la naturaleza se diera ese regalo de reproducirse a su antojo y descansa uno la vista con esos paisajes tan llenos de vida.

Debíamos llegar hasta la muy mentada finca "las puertas" y de ahi cruzar por un antiguo camino de herradura a la via hacia Ebejico, fue un descenso muy técnico con muchos sitios en donde debimos bajarnos de la bicicleta pero hay tramos en los que se puede pedalear. El camino empinado llega hasta el fondo de una cañada que en la crecidas por el invierno se ha llevado la bancada del camino. A partir de alli la via se abre un poco mas y se hace mas fácil de transitar montado en la bicicleta. Se baja y baja mucho, hasta conectar una via veredal y en una curva como tantas otras al fin se divisan los techos de teja en barro agrupados entorno a una iglesita muy bien conservada en adobe rojo.

Llegamos en la tarde como a eso de las 2:30 a Ebejico, pueblo muy organizado y definido en torno a su parque principal con su típico marco de la plaza, una ves ahí, decidimos almorzar, preguntamos por la via hacia Heliconia y nos advirtieron de mal estado de la via y de lo extenso del recorrido (en carro desde ahi son 4 horas), eso lo invita a uno a pensar y pese a que estábamos bien preparados para una larga jornada no consideramos nada recomendable dejar que la noche nos tomara por ese camino.

En el pequeño restaurante de la esquina del parque ordenamos el almuerzo, en mi caso ordene una deliciosa sopa casera con arroz y ensalada y Juan Ca un buen mondongo, en ese momento salía un carro (Chiva) asi le dicen a los camperos, este en particular se dirigía hacia Sevilla y se ofreció llevarnos por módicos 8000 pesos, ante el acoso de nuestro almuerzo, el conductor muy gentil mente me dijo que no había problema que podía esperar a que termináramos nuestro almuerzo. Subimos al techo del campero las bicicletas, un viejo Nissan cabinado del cual ya no se reconoce el color original, en el cual nos acomodamos algo apretados en la parte de atrás 8 personas y adelante otros 3 incluido el conductor. Había una ligera lluvia en nuestra partida y el movimiento brusco del ir y venir de huecos y vacíos nos indicaban que el estado de la vía no podía estar peor, subimos unos 4 Km. hasta que debimos detenernos porque un camión cargado de mercancía se había quedado varado. Yo ante la quietud y el almuerzo, me quede dormido un rato, afuera la lluvia caía mas fuerte, hasta que se escuchó al conductor decir, nos vamos, se trataba de un camioncito nuevo pero que por la cantidad de barro no logro subir y pasar el canalón, solo con la ayuda de otros vehículos que lo halaron lograron remolcarlo y sortear el tramo mas empinado y lleno de barro.

Llegamos después de subir mucho a Sevilla, eran ya las 4:00 p.m., de ahi estábamos dudando entre tomar un Bus hacia Medellin por la via a Ebejico y el boquerón o seguir por nuestra cuenta en bicicleta y llegar hasta Heliconia, decidimos que el esfuerzo y el habernos ganado ese ascenso aun nos daba tiempo para retomar el camino por nuestra cuenta y seguir subiendo y completar nuestro reto de hacer el circuito completo.

Asi que partimos de nuevo a rodar y luego de varias travesías por algunos kilómetros mas se desciende de nuevo hasta un río que atraviesa la via y en donde se ve el efecto inclemente del invierno porque se ha llevado completamente la bancada, desde este cañón se debe ascender de nuevo para llegar a Heliconia hasta allí, el recorrido acumula un poco mas de 80 Km. y casi 10 horas de recorrido, pero hacían falta 16 Km. mas para llegar al alto del Chuscal y 4 Km. mas para bajar a San Antonio, la noche se acercaba, eran ya las 6:00 p.m., asi que decidimos aprovechar el paso de un camión que lleva insumos a las fincas en la zona para ver si nos acercaba al menos a Heliconia, con tan buena suerte que nos dijo que se dirigía a San Antonio de Prado, asi que subimos las bicicletas y completamos los 110 Km. del recorrido cómodamente sentados y completando una jornada de mas de 12:00 horas.

Creo que el recorrido se puede hacer completo en cicla, pero se debe madrugar mucho mas y no parar tanto, aunque por la belleza de los paisajes se que será para muchos muy complicado no detenerse y dejarse maravillar por esta ruta. ¿Porque no hacerlo?.

Asi que la moraleja esta vez es que para descubrir nuevas rutas se debe escuchar a los lugareños de las diferentes alternativas de llegar a un lugar, ellos conocen muchas rutas alternas que invitan a mas y mas aventuras y no hay nada mejor que descubrirlas porque en cada una de ellas hay un cuento mas para recordar.

Debieron pasar mas de 20 años para al fin descubrir que hay detrás de nuestros cerros occidentales de nuestra amada Medellin, ya tengo claro los paisajes, las montañas y todo lo que esconde esa topografía Antioqueña, bien vale la pena así deban pasar muchos años para ir a Ebejico y responder a las preguntas que desde niño nos formulamos, todo esto vale la pena, todo esto es un regalo.

Una vez mas se lograron 3 pueblos para la colección y como siempre con una aventura mas para compartirles a todos de nuestras andanzas y locuras en bicicleta de montaña.

Saludos a todos

Machacho