La Pintada- Marmato- Supía- Riosucio- Quinchía- Guática

Primer día de travesía por los departamentos de Caldas, Risaralda y Valle del Cauca.
Desde La Pintada salimos temprano, con la idea del primer ascenso de nuestra jornada en mente y como primer objetivo el municipio de Marmato, Caldas. El ascenso en su primera mitad es por carretera pavimentada, la otra mitad tiene tramos empinados en terreno destapado, por lomas desafiantes, este municipio es reconocido por sus minas de oro, cosa que hace ver un paisaje feo, ríos contaminados por el mercurio y montañas agrietadas, su casco urbano es pequeño, se destaca por ser el cuarto municipio mas viejo de Colombia, pero es hasta ahora el único pueblo que conozco que no tiene atrio en su iglesia, ni parque de Bolívar; en este lugar desayunamos y nos regresaríamos unos kilómetros antes para continuar con un fuerte ascenso hacia el corregimiento de San Juan, un sitio un poco de más ambiente de colonización antioqueña, de allí seguiríamos subiendo unos kilómetros más para luego empezar con el descenso a Supía, cuando lo vimos fue inevitable no parar a tomar un registro de un valle que se observaba imponente, alli llegamos a comer frutas para continuar con el fuerte ascenso a Riosucio, 13 kilómetros pero con la fortuna de un sol oculto durante la subida. El casco urbano de Riosucio es extenso, lo conocía de nombre por su famoso carnaval del diablo que se celebra cada dos años, aquí llegamos a almorzar, cuando terminamos el agua nos retraso por un corto tiempo, de alli salimos al segundo parque del municipio, luego buscamos la salida hacia la vía principal para continuar con un ascenso de 6 kms hacia el alto del Batero, un cerro que sobresale imponente en esta región, continuamos con el descenso hacia el municipio de Quinchía, territorios del departamento de Risaralda, " la villa de los cerros" como apelativo nos daba la bienvenida, en el parque llegamos a degustarnos un buen café. Del parque salimos en busca de una trocha que nos recortaría camino hacia la vía a Guática, saldríamos por una empinada calle hacia el mirador de la virgen, instalamos luces y a subir se dijo, una carretera con tramos técnicos pero nada difíciles, un camino muy agradable, al salir a la vía pavimentada, seguimos en ascenso hacia San Clemente, todos a buen ritmo rematando esta buena subida nocturna, a dicho corregimiento ingresamos para conocerlo, en la salida a la principal paramos en una casa a comer empanadas, ya necesarios para el remate en descenso hasta nuestro destino final, Guática- Risaralda, un municipio con un clima frío, agradable por su gente, alli pasaríamos nuestra segunda noche de descanso en esta espectacular travesía de 250 kms.
Un breve resúmen de este primer dia de alta montaña.