Jarabeltrán - Pino Alto - Fortín Alamedilla - Cerro Alarcón

Circular desde Jarabeltrán. Salimos de la urbanización por el sendero de Cuerda Herrera, que enlaza con el camino de la Mina del Capitán, con sus durísimas rampas que nos servirán de desayuno. Cuando el camino llanea, lo abandonamos y tomamos brevemente el camino del Molino, hasta llegar a las inmediaciones del cerramiento de una propiedad. Ahi, giramos hacia el norte y nos adentramos en uno de los tres tramos más divertidos de la ruta.

Se trata de un sendero que serpentea, a través de una zona de monte bajo y matorral, cerca de Pino Alto. Es un poco laberíntico y, además, con el paso del tiempo, modifica su configuración con el tránsito de personas y animales; pero sirva para orientarse, sin tener que estar todo el rato pendiente del track, que en cada bifurcación hay que tomar la de la derecha. Al final, se sale a la colada de la Mina de Falcó, por la que nos dirigimos hacia la urbanización, la cual circunvalamos en sentido horario por sus calles perimetrales.

Salimos a una rotonda en la M-510, la giramos, y entramos en el camino de Navalroble, desde el que vemos el pueblo de Valdemorillo. En una encrucijada asimétrica, giramos hacia el norte y continuamos por la vereda de Los Vaqueros. Tras pasar junto a la urbanización El Paraíso (solo un promotor inmobiliario puede poner un nombre tan imaginativo), en la bifurcación seguimos por el camino de la izquierda, que continúa siendo la misma vereda.

Al llegar junto a las primeras edificaciones del Parque de las Infantas, giramos a la izquierda y tomamos la pista del camino de Prado Silva en dirección a la carretera de El Escorial. No es necesario incorporarse a la misma, pues un sendero nos permite continuar en paralelo a la calzada para, poco más adelante, cruzar con precaución e incorporarnos a la colada de Fuente Vieja. Después de vadear el arroyo homónimo, esta vía pecuaria ofrece un tramo precioso, encajonada entre muros de piedra y con vistas muy bonitas.

La colada desemboca en el cordel del Puente de San Juan, que tomamos hacia el sur. En las proximidades de Fresnedillas de la Oliva lo abandonamos provisionalmente para seguir un sendero que nos lleva a la Posición Alamedilla; un fortín, vestigio de la Guerra Civil Española, menos conocido que el blockhaus de Colmenar del Arroyo, pero con una estructura más compleja y ubicado en un precioso otero.

Cruzamos la carretera M-521 y retomamos el cordel del Puente de San Juan, el cual dejaremos, girando hacia el este, para adentrarnos en el camino de Navahonda, que nos conducirá a las afueras de Navalagamella. Al final del mismo, bordeamos la finca de El Romeral, bajamos a la carretera por su pista de acceso, cruzamos la calzada y continuamos descendiendo unos metros junto al cauce del arroyo de La Veguilla.

Atención aquí al track, porque hacemos un giro hacia el norte y nos adentramos en el segundo sendero bonito de la jornada, por el que nos dirigimos serpenteando hacia el pueblo. Al llegar junto a las casas, salimos a la carretera M-521 y la tomamos durante un breve trecho para bajar al canal de Picadas, al cual nos incorporamos haciendo un bucle y paso bajo, para evitar el peligroso giro a la izquierda.

El canal, como es sabido, nos destrozará las piernas con sus terribles toboganes. Atravesamos toda la urbanización de Cerro Alarcón y, nada mas salir de la misma, giramos hacia el norte y tomamos el tercero de los bonitos senderos que tiene esta ruta. Subimos por él hasta que vierte en el camino de Lanchalagua. Como el recorrido se nos ha quedado un poco escaso, mareamos la perdiz y continuamos Lanchalagua arriba para después cambiar de rumbo y descender por la Calleja de Panaderos (en la última actualización del IGN la han puesto como vereda del camino de Robledo de Chavela, la cual discurre en paralelo un poco más al oeste).

Al llegar a la cañada real segoviana, vamos por ella en dirección a la carretera M-600 y la cruzamos con seguridad por el paso subterráneo que da servicio a las tuberías de agua. A continuación, seguimos en paralelo a la propia carretera por el camino que enlaza -ahora sí- con la vereda del camino de Robledo de Chavela; y continúa el descenso en paralelo ahora a la M-853, hasta llegar al punto inicial y final de esta ruta.