Barranco del Puerto-Fuente de la Teja-Trincheras de la Veguilla. Sierra Alfaguara. Parque Natural Sierra Huétor.

La Sierra de la Alfaguara forma parte del Parque Natural de la Sierra de Huétor, que está situada en el centro geográfico de la provincia de Granada. Uno de los puntos de acceso a este paraje es el pueblo de Alfacar, municipio que fue lugar de recreo de los monarcas ziríes. El manantial de Fuente Grande, también conocido como de las Lágrimas, se localiza en la parte alta del pueblo. La fuente, que data del siglo XI, es uno de los más importantes vestigios de la época de los califatos que se conservan actualmente.

Desde allí, en dirección a Nívar, se puede tomar la carretera que asciende hasta el área recreativa de la Alfaguara. En ese paraje, junto a un campamento de verano donde abundan las barbacoas y los bancos de piedra, se puede visitar la colección botánica del Arboretum, un antiguo vivero forestal del que se obtenían las plantas para las extensas repoblaciones que se realizaron en estas sierras.

Iniciamos la ruta en bicicleta en el barranco del Puerto, bajo los pies del Cerro de las Higuerillas y nos disponemos a visitar la Fuente de la Teja y las Trincheras de la Veguilla con mi gran amigo Yeste y Carlos recién llegado de Alicante. Dos grandes amigos de la infancia. Seguimos por la pista principal GR-3103 dirección Barranco la Hoz. Barranco que nos dejaremos caer como el que no quiere la cosa hasta el emblemático paraje de la Fuente de la Teja.

La llegada hasta la Fuente de La Teja, que se encuentra en pleno Parque Natural de la Sierra de Huétor, se realiza de manera fácil y cómoda. Este paseo se puede recorrer tanto en bici como caminando, y es ideal para aquellas personas que se inician en en mundo del senderismo, y también para las personas con movilidad reducida que quieran disfrutar de un día en plena naturaleza.

Las aguas de la Fuente de La Teja son las que inician el curso del Río Darro. Este tranquilo y olvidado lugar de La Teja, fue hace más de cuarenta años punto de reunión de muchos visitantes, que provenientes de los pueblos cercanos y de la capital granadina, se acercaban a pasar un domingo de campo. La afluencia a este paraje por aquel entonces es comparable, hoy en día, con el que tiene el llano de la Perdiz.

Los alrededores de la Fuente son un claro ejemplo del hábitat de ribera, donde podemos encontrar álamos, zonas de matorral con mimbreras, sauces, y algunos arces de gran porte. También podemos disfrutar de la presencia de encinas, pequeños bosquetes de robles y una gran masa forestal de pinos de repoblación. Cercanas a la pista que nos lleva a la Fuente de la Teja, se encuentran tres interesantes bocas de minas de plomo, que datan de mediados del siglo XIX, y que se denominaban Crepúsculo, La Aurora del Pueblo y el Capricho. También en los cerros próximos a la Fuente de la Teja hay numerosas trincheras pertenecientes a la guerra civil. Todo esto convertirá nuestro paseo en un interesante itenerario histórico.

Seguimos la marcha después de disfrutar de tal paraje y seguimos por la pista y nos deviamos a la derecha para seguir por la pista que nos conduce hasta las antiguas trincheras de la Veguilla. Estas Trincheras se sitúo la línea del frente de guerra que se mantuvo prácticamente hasta el año 39. Este frente empezaba en Motril y atravesaba Sierra Nevada, con la paradoja que mientras que el Mulhacén estaba en manos republicanas, el Veleta lo era en manos Nacionales, así la línea cruzaba por Guejar-Sierra , Sierra de Huetor Santillán, Cubillas, Moclín y así hasta llegar a Córdoba.

Abunda las estructuras de hormigón, pues los nacionales emplearon buenos materiales en la construcción de sus trincheras, aunque uno de los motivos es que se quedaron con las canteras de Sierra Elvira. Podemos observar restos de una habitación en la que se ha derrumbado la bóveda, que se aprecia en una esquina parcialmente. También encontraremos los restos de un bunker con doble entrada y situado bajo el suelo para poder resistir la artillería. En estos dos espacios aún se conservan pequeños restos de maderas y de alambre de espino. El resto del complejo son una serie de líneas de trincheras que van a parar a los diferentes parapetos, nidos de observación y ametralladoras.

Dos de ellos tienen vistas al mirador de las Veguillas y a todo el Valle del Río Darro y al Barranco del Polvorite. Otro de ellos cubre el camino de entrada a las Trincheras, que si bien hoy tenemos una gran pista forestal, en tiempos de guerra, no sería tan grande el acceso. El resto de puntos de observación, cubren todo el perímetro de este enclave elevado en el terreno. Las líneas de trincheras en algunos tramos se conservan perfectamente, mientras que otros se encuentran en mal estado. Llama la atención como después de 80 años, han nacido pinos en medio de las trincheras, con un grosor y una envergadura más que considerable, igualmente sigue llamando la atención que se sigan manteniendo en pie, pese a los años transcurridos.

Después de un buen tiempo en las Trincheras y disfrutado como nunca tengo la misión cumplida y era enseñarle a mis amigos estas emblemáticas. Trincheras que nunca habían estado. La idea era dar la vuelta por la Pista que va para la Cueva del Gato, por la pista que sube por el barranco de la Umbria y hacer la circular por el area recreativa de la Alfaguara, pero la tarde se nos ha echado encima y hemos decidimos enlazar con un sendero muy frondoso y técnico como para ir con la bicicleta donde hemos tenido que ir gran parte del trayecto andando hasta llegar de nuevo a la pista que nos ha subido a las dichas Trincheras. De nuevo llegamos por donde hemos venido. Fuente la Teja, Barranco de la Hoz, pista principal y de nuevo al Barranco del Puerto.

Hemos disfrutado como nunca del gran pulmón de Granada. Si amo el Sulayr, a esta maravillosa Sierra le tengo un especial cariño.

Nos vemos en las montañas.