Ruta 164. Sierra de Cameros (II) y puerto de Piqueras // Route 164. Cameros mountain range (II) and Piqueras pass

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Del libro “Las mejores carreteras para recorrer en moto. España y Portugal”, de Pedro Pardo (Editorial geoPlaneta Nómadas):

Ruta 164. Sierra de Cameros (II) y puerto de Piqueras

Entre Logroño y Soria, la N-111 tiene que salvar el abrupto territorio de la sierra de Cameros a través de un hito legendario: el puerto de Piqueras, casi siempre cerrado a causa del hielo. Un túnel permite evitarlo, pero los motoristas de raza no dejarán pasar la oportunidad (si las condiciones climatológicas lo permiten) de disfrutar de un trazado a veces exigente, otras placentero y siempre divertido

Como ocurre con los tramos favoritos de los motoristas, este atraviesa parajes de excepcional belleza, bien entre preciosos bosques donde cohabitan en armonía arbolado atlántico (hayas) y mediterráneo (robles), bien a orillas del embalse de Pajares o por el magnífico cañón del río Iregua labrado en la piedra caliza, a los pies de cuyos altos paredones se rueda. Irrepetible

Mi opinión

Como bien indica el autor, el puerto de Piqueras hay que subirlo sin usar el túnel. Un asfalto estupendo y una carretera desierta permiten disfrutar de un buen puñado de curvas de herradura. Tras coronar la cima existe un mirador sobre la sierra de la Cebollera que merece la pena

Descendiendo el puerto se ve la indicación de la Venta de Piqueras. Si es hora de comer, este lugar es una estupenda opción para parar y descansar

La bajada de Piqueras hacia La Rioja es cómoda y tranquila, con asfalto muy bueno y curvas muy conocidas por los moteros riojanos. Se baja hasta Villanueva de Cameros donde se gira a la izquierda para bordear el embalse de González Lacasa

El puerto de La Rasa es otra subida entretenida y sin tráfico. En mi camino hacia Torrecilla en Cameros me he desviado hacia este puerto para visitar Torre en Cameros y disfrutar de otra carretera casi vacía y con divertidas curvas cerradas, subidas y bajadas. El pueblo tiene el encanto de estar al final de una carretera sin salida: el mundo se acaba aquí

Es digno de mención el trazado por el cañón del río Iregua, con las montañas rojas perfiladas por el río

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From the book "The best roads to travel by motorcycle. Spain and Portugal", by Pedro Pardo (Publisher geoPlaneta Nómadas):

Route 164. Cameros mountain range (II) and Piqueras pass

Between Logroño and Soria, the road N-111 has to cross the abrupt territory of the Cameros mountain range through a legendary landmark: the Piqueras pass, almost always closed due to ice. A tunnel makes it possible to avoid it, but the motorcyclists of race will not miss the opportunity (weather permitting) to enjoy a sometimes demanding, sometimes pleasant and always fun route

As it happens with the favorite stretches of the motorists, this one crosses places of exceptional beauty, either among beautiful forests where Atlantic (beeches) and Mediterranean (oaks) trees cohabit in harmony, or on the banks of the Pajares reservoir or through the magnificent Iregua river canyon carved in the limestone, at the foot of whose high walls we ride. Unrepeatable

My opinion

As the author well indicates, the Piqueras pass must be ascended without using the tunnel. A great asphalt and a deserted road allow you to enjoy a good handful of horseshoe turns. After crowning the top there is a viewpoint over the mountain range of Cebollera that is worth the effort

Descending the pass you will see the sign for Piqueras inn (Venta de Piqueras). If it is time to have lunch, this spot is a great place to stop and rest

The descent from Piqueras to La Rioja is comfortable and quiet, with very good asphalt and curves well known to Riojan motorcyclists. It goes down to Villanueva de Cameros where it turns left to border the González Lacasa reservoir

The La Rasa pass is another fun ascent with no traffic. On my trail to Torrecilla en Cameros I have turned off towards this pass to visit Torre en Cameros and enjoy another almost empty road with fun hairpin bends, climbs and descents. The village has the charm of being at the end of a dead end road: the world ends here

It is worth mentioning the route through the Iregua river canyon, with the red mountains outlined by the river