Rosario-Careaga-Timbo Colorado-Timbocito-Paranacito-Boca del Malo-Las Mangas-Las cuevas-Boya 500-Rosario

Recorrido total: 276 km
La la idea de esta Ramada era estar conmigo mismo los cuatro días el feriado largo, si bien quizá el momento no era el más indicado dado que el río bajó mucho de golpe y había mucho barro, tanto que se hacía casi imposible parar en cualquier lado, a esto se le sumaba el frío con lo cual era muy muy difícil estar seco en los momentos de acampe. Por lo cual había que ser muy cuidadoso con la elección del lugar de acampe, con el agravante de que los días son muy cortos los días más cortos del año, por lo tanto debí arrancar de noche y parar acampar de noche si es que quería cubrir la distancia que deseaba.
Había seleccionado previamente el camino a seguir y lo había estudiado cuidadosamente pero realmente no sabía con qué me podía encontrar ya que el río como lo mencioné anteriormente había bajado muy de golpe Y quizá muchos de los lugares donde pretendía ir se encontrarían cerrados con un barro muy pegajoso y casi imposible transitar, pero bueno tengo bastante experiencia con el barro jajaj.
Día 1
Recorrido del día: 55 km. Tardé un poco en acomodar el kayak y salí remontando por el río principal pasando el puente la isla de los mártires La Isla rosita, hasta llegar a la isla del pelle cruzando el Paraná viejo de San Lorenzo. Luego costeando la isla del pele crucé el canal del Paraná viejo San Lorenzo para seguir remontando hasta llegar a la boca del bobo. Aquí esperaba encontrar el cariaga con una fuerte correntada que me tira hacia adentro hacia donde yo quería ir, pero no sucedió así sino que el cariaba casi no corría, prácticamente era una pileta con lo cual se hizo un poco más tedioso porque venía de remontar 29 km por el brazo principal del Paraná. Dado esto bueno tuve que meter pala por el cariaga cuando quise parar al lugar del almuerzo me enterré hasta la cintura literal queriendo sacar el calla que había quedado enterrado en el barro se me fue el medio del Río, y lo tuve que ir a buscar nadando.
Todo esto hizo que quede todo mojado pero como era muy difícil parar tuve que continuar remando hasta la parada que tenía prevista en la entrada del timbo colorado. El tipo colorado nace de la bifurcación última que tiene el cariaga antes de llegar a las lagunas, por no decir que es la única bifurcación real. Aquí la cambio fue tranquilo no me pude limpiar el barro del todo ya que había una barranca de aproximadamente 10 m de largo por 3 m de alto que así imposible limpiarme el barro así que opté por ponerme las medias y la ropa encima para zafar del frío que ya en ese momento de noche ya era bastante fuerte. Bueno ahí me dispuse a almorzar hice un fuego para calentarme armé la carpa y todo se desarrolló con normalidad.
Día 2
Recorrido total: 53 km
A la mañana siguiente nada de lo que había puesto a secar estaba seco valga la redundancia, tenía las dos remeras mojadas así que me tuve que poner la ropa mojada el chaleco y cubrecockpit el mojado, por supuesto la carpa también empapada, y con las primeras luces del día arranqué a remar.
Este camino ya lo conocía lo había hecho con anterioridad sabía lo hermoso que era el timbo colorado con unas barrancas altas mucha vegetación y mucha fauna. El mismo termina en una serie de lagunas, serpentea bastante ya que prácticamente va circulando la Laguna grande. Por estas lagunas pude conectar sin problema sin empantanarme pasando bien, y así agarrando varios riachos de los que no sé el nombre, pude conectar con el timbocito, este Arroyo también lo conocía Y es hermoso distinto al tiempo colorado pero muy lindo. Ese día era espléndido, pude almorzar sin problema subiendo el calla a una barranca. Y hasta un pescador me regaló dos taruchas. La guía de remontar este casi por completo. Desarrollo se caracteriza por la gran cantidad de curvas que posee, si bien la correntada no era fuerte era en contra y sumado esto a lo cerrado de los meandros, se hacía lento el andar, pero la verdad que era muy lindo y valía la pena. Remando se hizo de noche, pretendía acampar antes de llegar a la boca del timbocito, pero ya había oscurecido bastante, era una noche free cerrada, y por suerte para mí di con un lugar hermoso mágico. Ya era tarde para hacer las taruchas necesitaba calentarme y armar la arranchada, además que habían hecho un viaje largo conmigo y no sabía bien el estado que se encontraba y decidí tirarlas. Luego de esto la noche se desarrolló con tranquilidad saqué algunas fotos de larga exposición contemplé el río los sonidos de la isla, ruidos que denotaban la gran cantidad de fauna que había en el lugar.
Día 3
Recorrido: 69 km
A la mañana siguiente no cometí el mismo error de la noche anterior, sino que dormí con la ropa de remar abajo de la ropa de abrigo. La noche eran frías pero se soportaba, creo que las ganas de estar ahí aminoraban un poco el frío.
Después de tomar unos mates me puse a preguntar el bote y arrancar remando hacia la boca del timocito, en el agua sí estaba fresco y había un poco de bruma. Ayer al timbocito sabía que debía ir a favor de este para por una serie de riachos de desconocido nombre para mí, empalmar con el río de las mangas que me llevaría hacia las cuevas. Tomé el primer riacho hacia la izquierda en el cual ya estaba muy bajo muchos árboles que tuve que sortear, por este llegué a un Arroyo ancho que parecía más una laguna que un Arroyo con el cual me topé primero con una tapia de barro que sortee arrastrando el bote un poco, pero luego llegó a un lugar donde era imposible pasar. Arrastre bastante el bote la peché todo lo que pude, pero al cabo de un rato de renegar vino al barón alto el cual crepé y vi que era imposible salir de ese lugar así que decidí retirarme. Por un momento sacando cuentas de la distancia el tiempo y la hora de llegada del martes pensé en despertar de llegar a las cuevas, pero hago en mí decía que tenía que ir, así que tomé el mismo camino por donde vine hasta salir al timbocito el cual remonté hasta la boca donde se encuentra el parador y la margarita Boya 500. Antes había hablado con algunos lancheros que me comentaron que el arroyo el malo estaba abierto y se podía llegar a las cuevas sin problemas, así que una vez en la boca remonté el Paraná hacia la boca de los tachos donde nace el arroyo el malo, por este le metí, hermoso a propósito, distinto al timbo colorado y al timbocito, cada uno tiene su magia como quien diría. Sacando cuentas sabiendo que eran aproximadamente unos 28 km a las cuevas, me preocupaba no tanto la hora de llegada sino la vuelta del día martes. Bajé por el arroyo el malo luego boqué en las mangas y luego en el arroyo las cuevas que me llevaron a la localidad al mismo nombre. Ahí en las cuevas no hice más que comprar un pedazo de queso y mortadela, lo cual era un antojo que tenía, muy embarrada la costa por cierto como casi todas las travesía. Sacando cuenta que al día siguiente quedaban aproximadamente unos 130 km sabía que iba a llegar medio justo al cierre de la guardería, ya que no eran 130 km a favor sino que había que remontar 30 km. Así que la decisión que tomé en ese momento fue de calzarme la luz y regresar por lo menos dos horas de esos 28 km que quedaban hacia la boca. Habría remado 14 o 15 aproximadamente en una noche muy cerrada con bruma donde realmente no se veía nada. Previamente y muy inteligente de mi parte en el camino de ida había marcado varios lugares para acampar esa noche, así que de esos lugares tiré ancla en el lugar que estaba justo a dos horas de la boca, y ahí me quedé. La noche se desarrolló también con tranquilidad dormí bastante bien aunque el piso estaba muy húmedo porque era un arenal con barro abajo el cual fue un poco incómodo pero nada más de lo que había vivido hasta ahora.
Dia 4
Recorrido: 101 km
El día 4 día martes, día nacional de nuestra bandera, era el último día y en el cual debía llegar sí o sí a Rosario antes de las 21 horas dado al cierre de la guardería. Me había propuesto salir antes que los otros días y por suerte lo conseguí logré estar aproximadamente 8:20 en el agua, con las primeras luces. De ahí no hice más que remontar el arroyo que tenía más correntada de la que pensaba ya que el día anterior no había sentido la correcta a favor. Luego traté de agarrar el Paraná principal bajando casi por la hidrovía. En una parte desvié agarré un bypass que está a la derecha de una pequeña isla en la parte Entrerriana. Antes de ello pasé por la mítica voy a 500 que para mi curiosidad estaba muy movida hacia la costa a diferencia de la última vez que pasé. También en ese bypass mencionado pude ver una barcaza antigua de la que muchos habían hablado y tomarle una fotografía. Luego seguí bajando por este brazo hasta parar en el islote los pájaros, islote hermoso con mucha arena donde me puse a almorzar en un día pleno con un sol radiante. El almuerzo no fue muy largo y me dispuse a volver hacia Rosario. Pasé hacia la izquierda el islote los pájaros y luego para no entrar para nada las chatas donde había mucho movimiento de barcazas agarré a la derecha de La Isla carcaranía que me desembocó en la última parte del coronda. Ahí no hice más que acomodarme más o menos en el chorro de agua y bajar hacia Rosario. La hora de llegada fue aproximadamente 6:40 con lo cual me hubiera sobrado tiempo para volver de las cuevas pero eso me permitió estar un poco más holgado para acomodar y limpiar un poco el bote ya que tenía barro por todos lados.
Luego volver queda lo de siempre extrañar La Isla hasta la próxima remada.