Diamante-Boca de Los Tachos-Boya500-Timbó Colorado-Los Boquerones-Careaga-Victoria

Una travesía organizada por los chicos de Victora, de la cual fue un honor participar. Hubo que llevar los kayak a Diamante para emprender la bajada. Javier uno de los chicos gentilmente me presto un kayak, un Eladius Advance, que navegaba como los dioses.

Saliendo del Club Náutico Diamante, al rededor de las 9 am, bajando por el Rio Parana hasta entrar en la Boca de los Tachos. La parada del almuerzo se hizo en el parador Isla Margarita Boya 500, luego entrando al Paranacito, a unos 200 m, sale a la izquierda el Timbò Colorado, con barrancas pronunciadas y vegetación abundante. Remamos toda la tarde por el Timbo, con algunas escasas paradas, y luego de renegar para conseguir un lugar de acampe para 9 kayak, conseguimos un buen lugar para pasar la primer noche y comer un buen asado Victoriense.
El segundo día, seguimos por el Timbo colorado, disfrtando de sus bosques en galeria, pudiendo hacer avistaje de aves, carpinchos y hasta un yacare. De a poco la vegetación fue perdiendo altura y densidad, la corriente también aminoro su velocidad, ya que corría mucho en la naciente del rió.
Luego de almorzar, entramos en un paisaje mas lagunero y palustre, contábamos con una lancha de apoyo, piloteada por el genio de Jose que nos indicaba el dificil camino a seguir, ya que para esa altura, el rió es un laberinto de brazos entre las lagunas, donde muchos están tapiados. Tuvimos que hacer un camino un poco mas largo de lo común para evitar una tapia, así llegamos a Los Boquerones al atardecer, y luego de desembocar en el Riacho Caeraga, paramos para hacer la segunda Noche, y deleitarnos con unas magnificas pizzas que hizo Balà, uno de los chicos de Victoria.
Al tercer día, solo quedaba 30 km de los 135km, asi que la remada fue mas tranquila, cruzamos la laguna grande, mucho mas reducida por las bajantes y los pastizales, y paramos a almorzar en el Parador de los chicos de Victoria, que contaba con un quincho, parrilla y plantas exóticas. Luego del almuerzo, la llegada fue muy tranquila hasta victoria por el Rio Victoria hasta terminar en el Club de Los Pescadores de Victoria.