Carcaraña Baigorria 132,10 Km

Despues de haber terminado viaje anterior en la represa del molino Semino el objetivo era completar el Carcarañá hasta la desembocadura en el Coronda y desde ahí hasta Granadero Baigorria. El recorrido de 132 Km todo con corriente a favor se puede completar en dos días de navegación. Nosotros aprovechamos la tarde para avanzar 20 Km y llegar hasta el primer obstáculo de cuidado que es la usina de Lucio V. Lopez. El lugar para zarpar fue el Pque sarmiento en Carcarañá, tiene buen acceso, sombra, todos los servicios y nos permitieron dejar el vehículo estacionado. Zarpamos a última hora de la tarde con el río crecido por las lluvias, sin demasiado esfuerzo el promedio de desplazamiento estuvo cerca de 12 Km/h. En 2 hs llegamos al cruce de la ruta 34 donde unos 300 mts se encuentra un rápido fuerte pero fácil de pasar. Con el caudal del río era peligroso pasar la usina por agua, así que decidimos portear. La salida no fue fácil desde una cañada sobre la márgen derecha. Avanzamos una hora y media (unos 200 mts) y armamos campamento. El lugar es bueno, alto, con gramilla y un tupido bosque de acacias. La mañana siguiente encaramos los 300 mts restantes y en una hora y media estabamos nevegando nuevamente. El río sigue corriendo fuerte, pero no hay más rápidos. El próximo sobresalto es la represa de la papelera abandonada de Andino. Se encuentra en una recta donde la correntada se recuesta sobre la izquierda, las olas de reflujo llegaban a un metro de alto. Con la frecuencia y la velocidad del oleaje,un travesía cargado probablemente termine hundido. Subimos por la margen izquierda una barranca de unos 8 mts y observamos de arriba el paso. Por suerte la corriente era más tranquila cerca de la orilla derecha y si evitamos ser arrastrados al medio, se pudo pasar navegando. Hay que tener cuidado con restos de escombros a media agua aún con el río crecido. Desde Andino a Oliveros las orillas están bastante pobladas. El viejo puente del ferrocarril paralelo a la ruta 10 forma un pequeño rápido y de ahí ya no hay de que preocuparse. La corriente sigue fuerte, hay buena sombra, pero si se piensa en almorzar prácticamente no hay donde hacer costa. Nosotros encontramos un buen lugar antes de Oliveros sobre la margen izquierda, un escalón con gramilla y un lomo de arena muy arbolado con moreras donde colgar las hamacas. Zarpamos de nuevo a las cinco con la fresca. Una vez que se pasa Oliveros, donde hay casas a la orilla misma del barranco, se llega a un par de barrios cerrados (Campo Timbó y Carcaraes). Más adelante increíblemente sigue la corriente fuerte, las barrancas son más bajas pero en algunos momentos son altísimas. En este ultimo tramo antes de Gaboto hay buenos lugares, más accesibles para acampar. Llegamos a Gaboto al atardecer y decidimos avanzar algo por el Coronda para salir mejor al día siguiente. Cruzamos con un Sudeste persistente y amenaza de garúa hasta un montecito de espinillo que crecía sobre un banco de arena. Excelente lugar para acampar. Al día siguiente amaneció despejado y con mucho calor, decidimos ingresar por los riachos hacia Entre Ríos para evitar los puertos de santa Fe. Igual tuvimos que pasar con cuidado por el "riacho de las barcazas" que aunque Domingo tenía varios empujes maniobrando. Una vez en el canal la idea era tomar por Los Meones, entrar a la laguna y salir por Meones chicos. Pero el tiempo se empezó a poner feo y decidimos buscar reparo contra la costa en San Lorenzo. Oteando el cielo intentamos hacer el recorrido más directo a Baigorria, pero ante el cambio de viento al SO terminamos de cruzar el río y pegarnos a la barranca. Nos voló de todo por arriba y se largó un intenso chaparrón que duró algo más de media y nos sirvió para refrescarnos. El viento cambió al SE y se empezaron a armar olas así llegamos con un poco de baile y pleno sol a la playita de la reserva.