Volcán Poas, COSTA RICA
near San Juan Norte, Alajuela (Republic of Costa Rica)
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Trail photos
Itinerary description
Bonita ruta al VOLCAN POAS , (2708 metros de altura), dentro del Parque Nacional Volcán Poas, el más impresionante y visitado de Costa Rica .
Tiene dos conos importantes, el principal y más grande es La Laguna Caliente con una profundidad de 300 metros y un diámetro de 1,32 kilómetros, que lo convierten en uno de los más grandes del mundo. En su interior existe una laguna ácida y caliente muy activa , con emisión de gases y fumarolas esporádicas. Dispone de un semáforo de alerta por erupción con salidas de emergencia bien definidas. La última erupción importante tuvo lugar en 2017, que originó el cierre del Parque al público hasta 2018.
El segundo cráter llamado Laguna Botos, (en honor a sus antiguos pobladores) más pequeńo , tiene un diámetro de unos 365 metros, con una laguna de agua fría que proviene de la lluvia.
El sendero desde su inicio, se abre paso en medio de una vegetación exuberante, donde predomina el bosque nuboso, por lo que la sombra de los altos árboles no te abandona en todo el trayecto. Tal es así que solo en unos pocos miradores se puede ver el horizonte, el primer claro nos permite ver La Laguna Botos , un remanso de agua enmarcado por el verde bosque nuboso. La intensa lluvia (aquí llueve a lo bestia ) con fuertes rayos y truenos, no nos impidió disfrutar de las excelentes vistas.
Ya bien empapados :( :(, nos dirigimos al cono principal , por un sendero sumergido en una tupida vegetación que casi no deja pasar la luz, al llegar y asomarte al mirador construido al efecto, te quedas maravillado , por su enorme perímetro, su gran profundidad, sus escarpadas paredes y color intenso de su laguna ácida.
Allí arriba tienes la sensación de estar en peligro por la gran cantidad de avisos en caso de erupción además de un gran semáforo existente junto al cráter. (solo se permite permanecer en el cráter 20 minutos) .
La lluvia intensa que no cesaba , alejó a muchos visitantes temerosos del fuerte aparato eléctrico que emanaba de las cercanas nubes ello nos permitió observar y disfrutar casi en solitario de este peculiar y famoso volcán costarricense.
Al volver y ya al soco de la lluvia en el bonito refugio del Parque Nacional, nos sentimos afortunados pues nos informan que muchas veces las nubes bajas impiden ver la laguna y parte del cráter.
Nos marchamos felices por haber conocido uno de los volcanes más extraordinarios de la Tierra .
Tiene dos conos importantes, el principal y más grande es La Laguna Caliente con una profundidad de 300 metros y un diámetro de 1,32 kilómetros, que lo convierten en uno de los más grandes del mundo. En su interior existe una laguna ácida y caliente muy activa , con emisión de gases y fumarolas esporádicas. Dispone de un semáforo de alerta por erupción con salidas de emergencia bien definidas. La última erupción importante tuvo lugar en 2017, que originó el cierre del Parque al público hasta 2018.
El segundo cráter llamado Laguna Botos, (en honor a sus antiguos pobladores) más pequeńo , tiene un diámetro de unos 365 metros, con una laguna de agua fría que proviene de la lluvia.
El sendero desde su inicio, se abre paso en medio de una vegetación exuberante, donde predomina el bosque nuboso, por lo que la sombra de los altos árboles no te abandona en todo el trayecto. Tal es así que solo en unos pocos miradores se puede ver el horizonte, el primer claro nos permite ver La Laguna Botos , un remanso de agua enmarcado por el verde bosque nuboso. La intensa lluvia (aquí llueve a lo bestia ) con fuertes rayos y truenos, no nos impidió disfrutar de las excelentes vistas.
Ya bien empapados :( :(, nos dirigimos al cono principal , por un sendero sumergido en una tupida vegetación que casi no deja pasar la luz, al llegar y asomarte al mirador construido al efecto, te quedas maravillado , por su enorme perímetro, su gran profundidad, sus escarpadas paredes y color intenso de su laguna ácida.
Allí arriba tienes la sensación de estar en peligro por la gran cantidad de avisos en caso de erupción además de un gran semáforo existente junto al cráter. (solo se permite permanecer en el cráter 20 minutos) .
La lluvia intensa que no cesaba , alejó a muchos visitantes temerosos del fuerte aparato eléctrico que emanaba de las cercanas nubes ello nos permitió observar y disfrutar casi en solitario de este peculiar y famoso volcán costarricense.
Al volver y ya al soco de la lluvia en el bonito refugio del Parque Nacional, nos sentimos afortunados pues nos informan que muchas veces las nubes bajas impiden ver la laguna y parte del cráter.
Nos marchamos felices por haber conocido uno de los volcanes más extraordinarios de la Tierra .
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