Vía Francigena. Suiza 9ª etapa

Martigny -Orsières
La salida de Martigny se hace por la Via del Gran San Bernardo hasta llegar a Martigny Bourg, un coqueto barrio a las afueras de la ciudad, con casas señoriales y restaurantes. El Hotel-Restaurante 3 Coronas es recomendable.
Antes de cruzar el río, se inicia el sendero de tierra que nos conducirá a nuestro destino. Caminamos junto a las vias del tren para, después de una fantástica área de descanso con barbacoa, electricidad y agua, cruzamos las vías.
Ahi empieza la verdadera, bastante dura al principio, para posteriormente una sucesión de subidas y bajadas nos conduce hasta una pasarela metálica sobre el río La Dranse.
Tras una corta subida llegamos al pueblo de Le Borgeaud, donde empezamos a ver los recuerdos del paso de Napoleón con sus tropas en 1800.
Por carretera nos dirigimos al siguiente pueblo Bovernier, que cuenta con estación de ferrocarril. La línea del San Bernardo express recorre todo el valle. Bovernier es una pequeña población, inmaculadamente limpia y donde en cada esquina puedes encontrar una fuente.
Después de un tramo en el que hay que tener precaución, ya que circulamos junto a la carretera y tras pasar un aserradero, el sendero se interna en un espeso bosque, muy húmedo, donde el musgo lo cubre todo
Después de varias subidas y bajadas llegamos a unos grandes bloques de piedra señal de algún desprendimiento pasado. Inmediatamente el sendero inicia una subida y hay que tener muchísima precaución porque todo parece indicar que el sendero gira a la izquierda cuando en realidad lo hace a la derecha, OJO muchísimo cuidado, no tomar el sendero de la izquierda porque lleva a una zona de deslizamiento muy peligrosa sobre el río.
El sendero continúa por el bosque con continuas subidas y bajadas, y con muchas raíces de los árboles, que a menudo hacen tropezar.
Después de un buen tramo por el bosque alcanzamos una pista de vehículos, muy cómoda de andar, que termina en un gran deslizamiento de piedras que se salva por una fuerte rampa.
Nuevamente, por una pista asfaltada alcanzamos el pueblo de Sembrancher. Lo primero que encontramos es la estación de ferrocarril para posteriormente entrar en el casco medieval de este bonito pueblo.
Tras una parada para beber y recuperar fuerzas con algo de fruta, hemos visitado la iglesia de San Etienne, renacentista, construida sobre los restos de la antigua iglesia románica.
El siguiente tramo a partir de aquí es probablemente uno de los más duros de la etapa, pues se salva en apenas 2 km una altitud de 280 m por pistas y bosque muy bellos. Una nueva parada para beber y encarar el último tramo de la etapa.
El camino continúa con las mismas características, tramos de bosque de pinos y abetos enlazados con bellas praderas y continuas subidas y bajadas.
A la vista de nuestra meta ha empezado a llover por lo que ha habido que cubrir la mochila y sacar el paraguas.
Con ligera llovizna hemos llegado a Orsières y al Hotel Terminus, junto a la estación, donde hemos pernoctado.