Vía Francigena 2024. Italia 7ª etapa Ivrea - Viverone

Hemos iniciado la ruta cruzando el río Dora Baltea y hemos atravesado el centro de la ciudad.
Nada más salir de la ciudad, el camino se introduce en un sendero precioso que nos lleva hasta la orilla del Lago de Campagna, uno de los 5 lagos glaciares de la zona de Ivrea.
Las panorámicas que ofrece el lago son preciosas con las montañas cubiertas de nieve en la lejanía.
Si algo ha caracterizado a la etapa de hoy ha sido el exceso de asfalto y hormigón, durante muchos kilómetros hemos transitado por carreteras y calles que bajo un fuerte sol ha hecho bastante penosa la etapa.
Llegado al pueblo de Burolo, un desvío de la Via Francígena me ha llevado hasta el mural del Juicio Universal, del artista Eugenio Paccholi donde Dios en el centro separa a los malos, a su izquierda, representado por la mafia, la extorsión, la droga, y los buenos a la derecha, representados, entre otros por los senderistas de la Via Francigena.
Para mi suerte en ese momento las campanas de la iglesia de San Pedro y San Pablo, tocaban a misa de 11, por lo que he podido cumplir el precepto dominical en una animada misa en la que el pueblo cantaba en muchas fases de la misa.
Terminada la misma, he tenido que acelerar el paso para alcanzar a mis compañeros, que me estaban esperando en la ermita románica de San Pedro y San Pablo in Pessano, una preciosa iglesia, con un campanario muy representativo del estilo románico pero que desgraciadamente no ha sido posible visitar.
Continuando el camino, hemos llegado a Palazzo Canovese, un pequeño pueblo sin más interés, si no fuera por la Trattoría Due Camini que está en el centro del pueblo y dónde, inesperadamente, hemos comido de maravilla.
A partir de aquí, el camino empieza a subir hasta el pueblo de Piverone, En el que aún es posible ver algunas torres de las murallas que rodeaban la ciudad. El camino desciende lentamente con el lago de Viverone como telón de fondo.
Un par de kilómetros más adelante, encontramos el Gesiùn di Piverone, ruinas de una capilla románica del S. XI.
Seguimos bajando hacia el lago, y después de recorrer una parte de la ciudad de Viverone, llegamos hasta nuestro alojamiento, el Hotel Royal, a orillas del lago Viverone.