Valle de las Iruelas-Casillas

Este Gredos oriental es el mas cercano a Madrid, es inexplicablemente un destino poco frecuentado ya que se trata de un punto geográfico de gran interés especialmente por los frondosos bosques que tapizan tanto su vertiente norte como la sur. Nuestra excursión atraviesa de la vertiente sur a la norte. La llegada a Casillas se realiza por una estrecha carretera en la que apenas entra el sol debido a la densa sombra de los castaños de la explotación de Rozas de Puerto Real que parece trasportarnos a otras latitudes ibéricas por lo umbrío del ambiente.
Casillas es un pueblo que descansa al pie de la montaña a considerable altura, 1050 metros. Nuestra ruta comienza remontando las empinadas calles del pueblo, algunas del 25% de inclinación, es un tramo corto. Tenemos que recorrer un kilómetro por una carreterilla hasta salir a nuestra senda, mas bien un carril que asciende suavemente por la falda de la sierra bajo las cumbres del puerto de Casillas y Alto del Mirlo. Atravesamos una autentica selva de bosque muy variado de roble, castaño, majuelo, alisos, retama, helechos, etc. Un último repecho nos conduce a la portilla de las Palomas donde entramos en la Reserva Natural del Valle de las Iruelas. Desde aquí descendemos por el viejo camino carretero de casillas, al poco comenzamos a ver ejemplares impresionantes de castaños que descansan en dehesillas monteñas, hemos entrado en el castañar del tiemblo. El paisaje es sobrecogedor, no es normal poder recorrer una mancha de bosque de castaño de este tamaño, el ambiente umbrío, la luz que apenas entra dentro del bosque, las rocas y el suelo cubierto de la flor del castaño, adornado por las pinchosas bolas de las castañas, hacen de este lugar un enclave mágico y si la fecha elegida nos brinda la suerte de encontrar el bosque teñido de colores, habremos triunfado. De camino veremos el refugio de Majalavilla, donde nos desviamos para visitar al gran protagonista de este bosque, el Abuelo, un castaño enorme de respetable tronco y edad (se le calcula 525 años, 19 metros de alto y otros tanto de perímetro).
Seguimos descendiendo por un agradable sendero pasando por la fuente del castañar hasta el Reajo donde encontramos la garganta de la Yedra que luce un precioso bosque de ribera de coriáceos alisos. De aquí por un sendero descendemos la garganta de la Yedra. Pasamos del piso del bosque húmedo al piso del pinar y la retama. Se trata de la
senda de San Gregorio que termina en un decadente palacete en ruinas cerca del pueblo del Tiemblo.