Travesía El Molino - El Chorro

Los ecosistemas más comunes de los Pueblos del Sur forman parte de este recorrido, todo un reto para la resistencia física. El trayecto se puede recorrer en uno o dos días de caminata a través de una de las zonas con mayor arraigo y tradiciones surmerideñas.

Desde El Molino hasta la aldea El Playón el recorrido es a lo largo de un valle para familiarizarse con el clima de montaña. Una vez cruzada la quebrada El Playón el camino empieza a subir por una ladera empinada. Paso a paso el sendero conduce al páramo, el paisaje se dilata en la medida de que se pisa la Loma Chacantera, cima dónde se eleva la vista hasta el valle El Playón.

La vegetación consta de un follaje muy característico extendido como alfombra por un amplio trecho hasta llegar a bosque subparamero, los líquenes poseen diferentes tamaños y formas. Cuando a lo lejos se divisan los altos troncos de las palmas se está próximo a El Palmar, aldea nombrada así por los árboles que la preceden.

La intervención humana se evidencia ante el contraste del follaje dejado atrás, los potreros que empiezan a cercar los pastizales y las minúsculas casas que empiezan a aparecer. Si quieren pernoctar es posible montando la carpa cerca de la antigua casa de bahareque de la señora Oliva Escalante y el señor Reinaldo Durán. El lugar está rodeado de cultivos y con ellos pueden conocer los rigores de la vida rural.

Sea el mismo día o el siguiente, el trayecto se reanuda hacia El Chorro donde hay una cascada que bautiza esta aldea. De ahí hay que buscar o contratar un vehículo que lo llevará a Chacantá.

La simbiosis paisajística entre actividades agrarias, prados solitarios sobre el relieve andino y el agua que llena ríos, quebradas, caídas de agua, sigue hasta llegar al encantador pueblo de Chacantá.

Para información sobre los servicios cercanos (alojamiento, comida, guías, transporte), ver http://destinopueblosdelsur.com/que-hacer/en-el-molino/ruta-el-molino-chacanta/