Tour de la Vallée de Derborence. Cantón du Valais. Suiza.

Llegar hasta el aparcamiento de Derborence ya es una excursión de por si. Una serpenteante carretera excavada en la montaña nos va internando curva a curva hacia el macizo de Les Diablerets. El paisaje es espectacular por la altitud de las montañas que nos rodean y por las panorámicas que nos va ofreciendo de los Alpes que hacen frontera con Francia.

Mientras subimos por la carretera, podremos oír el característico claxon del autobus de línea que hace la ruta hasta el refugio del Lago de Derborence.

Una vez en el aparcamiento, iniciamos nuestra excursión dejando Les Diablerets a nuestra izquierda.

El nombre de Les Diablerets proviene de varios desprendimientos que se produjeron en el siglo XVIII (1714 y 1749 para ser más exactos) y que fueron de tal magnitud que origininaron el que es ahora el lago más joven de toda Europa: el lago de Derborence.

Estos desprendimientos podremos observarlos al comienzo de nuestra marcha. Unas enormes rocas que jalonan el sendero y entre las cuales los pinos parece que se van haciendo fuertes...

Vamos ascendiendo suavemente por el sendero. Seguimos unas señales con los colores blanco, rojo y blanco que nos acompañarán durante todo el recorrido. En los carteles indicativos leemos 'Tour de la Vallée de Derborence'. Esa es la indicación que deberemos seguir durante nuestro recorrido.

El paseo nos ofrece paisajes típicamente suizos con prados, chalets, montañas y por supuesto, vacas...

Caminamos rodeados de montañas con unas paredes espeluznantes... Les Diablerets, le Mont Gond, le Mont de la Cavouère y por increíble que parezca, también el Mont Blanc. No me canso de fotografiar estos paisajes alpinos de ensueño.

La bajada es dura: unos 350 metros de desnivel, de los cuales deberemos remontar unos 200 en cuestión de 2 kilómetros para llegar finalmente al Lac de Derborence.

https://youtu.be/LvYzBXXkL5w

El esfuerzo ha merecido la pena. Junto al lago nos tomamos un refrigerio en el Refugio del Lago de Derborence.

Después de haber descansado comentando los principales atractivos de la ruta, nos dirigimos al aparcamiento para iniciar el regreso por la sinuosa carretera por la que vinimos.