SUBIDA AL PONTON

Iniciamos la ruta en el kilómetro 35 de la carretera CO-3402 que va de Córdoba a Villaviciosa por Trasierra. Allí podemos dejar el vehículo fuera de la carretera en un camino que se adentra unos 50 m hasta una cancela, justo a la altura de un pino que hay al borde de la carretera. Foto 1.

Situados en ese punto, si miramos hacia el este (por donde sale el sol) veremos como se alza imponente el cerro del pontón, cuya cima es nuestro objetivo principal, donde hay unas excelentes vistas panorámicas.

Podemos hacer la ruta en sentido horario, donde el esfuerzo principal se hace al principio, o en sentido antihorario para ir calentando piernas. Este último es el que se aconseja y el que se describe a continuación.

Una vez dejamos el coche debidamente aparcado, nos encaminamos hacia el pino que hay al borde de la carretera, donde nos encontraremos con una cancela y una alambrada baja. Si la cancela no está abierta, podemos pasar la alambrada para coger un caminito que transcurre el arroyo arriba. A mano izquierda veremos a lo lejos un colmenar antiguo.

Despues de 1500 metros de subida, llegamos a una loma donde el caminito se encuentra con otro mas importante que es una via pecuaria que va de Villaviciosa a Almodóvar, donde cogeremos a mano izquierda para seguir esta via pecuaria en dirección a Villaviciosa. Desde aquí recorremos 1000 metros más hasta un cruce de caminos, donde cogeremos el de la izquierda, que se encamina hacia la cima del cerro del Pontón, y que discurre paralelo a una malla ganadera.

Antes de comenzar la subida al Pontón pasaremos por otro colmenar antiguo, una especie de corral de piedras recogidas de la zona, y tras éste una explanadita con bonitas vistas ideal para echar un bocado o descansar antes de iniciar la subida.

Tras subir unos 200 o 300 metros ya hemos llegado a la cima. Desde allí podremos recrearnos con las maravillosas vistas, sobre todo, del cauce del río la Cabrilla, y echar algunas fotillos. Foto 2, 5 y 6.

La bajada transcurre al borde de un bosquete de pinos, donde en otoño podremos coger algunos nizcaletes.

Pasado el bosquete de pinos, ya divisaremos el sitio donde hemos dejado el coche, bajando por un camino que pasa junto al colmenar que vimos al principio de la ruta.

Es una ruta muy bonita para hacerla en cualquier época del año, sobre todo en primavera y en otoño, donde podemos observar gran cantidad de fauna salvaje, sobre todo ciervos, y si es en berrea podremos escucharlos de cerca.