-Senderismo, de Padre-nuestro al castillo del Vioque.

-El castro íbero- romano de Vioque datado de entre los siglos I y II d.C. se encuentra situado sobre un cerro a 493 metros de altitud sobre el nivel del mar y desde él se domina el pequeño valle del río Guadalmez. Dista de Santa Eufemia unos ocho kilómetros en línea recta, en dirección Noreste.
-Es una fortaleza con doble recinto de amurallamiento, de bella factura y gran calidad constructiva. El recinto interior es de construcción tronco piramidal a base de grandes sillares distribuidos en hileras, trabados en seco y sujetos por pequeñas lajas. La muralla exterior fue levantada aprovechando las defensas rocosas naturales, siendo de peor calidad.
-Es considerado por algunos historiadores como el enclave Túrdulo-romano de Sosintigi, situado sobre la vía romana del azogue, vía esta por la que se transportaba el cinabrio desde las minas de la actual Almadén hasta Córdoba.
-Se han encontrado también cerámicas islámicas de los siglos XII y XIII, como fragmentos de verde manganeso relacionados con la época.
-En el mapa de caminos medievales esta fortificación aparece situada junto a la vía que unía Córdoba con Toledo.
-Esta ruta parte de los ventorros de padre nuestro, no es circular, por lo que tenemos que tener en cuenta el kilometraje, en torno a los 19 kilómetros. Si la deseamos acortar podemos bajar en coche siguiendo el track hasta al vado del río Guadalmez para empezar desde ahí nuestro paseo. Un paseo que transcurre aguas abajo por la ribera del Guadalmez, con un paisaje inmejorable y una recompensa para finalizar como es el castillo del Vioque, donde las vistas son para disfrutarlas junto con su morador: el viejo acebuche.