Rute el Viejo-Pinar-Torre del Canuto-Cerro de Las Cruces y Sierra Alta
near Rute, Andalucía (España)
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Itinerary description
Exigente ruta, con subidas y bajadas pronunciadas (casi 900 metros de desnivel positivo) y un cresteo de más de 1 km por roca caliza que, añadido a su longitud, me llevan a calificarla de difícil.
Partimos desde el área recreativa de Fuente Alta, aparcando junto al Club de Tenis. Aquí se llega tras dejar Rute por la A-3226 (carretera de Priego) y luego seguir a la derecha durante 1 km por el camino de Priego.
Iniciamos la ruta continuando por este camino para visitar las ruinas de Rute el Viejo, fortaleza del siglo XIII del reino nazarí (asentada sobre un núcleo visigodo) de estratégica localización para la vigilancia y defensa de la frontera; esto hizo que desde inicios del siglo XIV, en tiempos de Fernando el Santo, pasase a poder cristiano, pero volviese a cambiar de manos en varias ocasiones hasta su definitiva conquista ya en el siglo XV (reinando Juan II). Poco después se abandonó (por su difícil acceso y el aumento de población -y quizás por estar hecha unos zorros tras tantas vicisitudes) y se fundó el actual Rute, unos 3 kms. al sur. Hoy parece un milagro que se mantenga en pie una de las muchas torres que poseía y algún lienzo de la muralla (de los 240 metros que tuvo), ruinas en medio de un olivar declaradas Bien de Interés Cultural.
Desandamos el camino (nos queda mucha subida como para volver campo a través) hasta el merendero de Fuente Alta, subiendo junto a la cerca de madera, hasta conectar con el camino ancho (esta subida tiene bastante pendiente y piedra suelta, es mejor ir por la senda). Por el camino, rodeados de pino carrasco de repoblación, cómodamente (a diferencia del resto de recorrido) llegamos hasta el refugio ADEBO (Asociación para la Defensa del Borrico), donde numerosos burritos viven tan ricamente a la sombra de los pinos (como en la sevillana).
Luego damos la vuelta para tomar una senda a nuestra derecha, que en acusado y zigzagueante ascenso por el monte Hacho (aliviado por las primeras vistas sobre el embalse de Iznájar, el mayor de Andalucía), nos lleva a su cima; pasados unos repetidores, llegamos a la torre vigía del Canuto, musulmana, también declarada BIC, en restauración. Desde aquí las vistas son impresionantes: el “Lago de Andalucía”, con la Peña de la Camorra, Cuevas de San Marcos, Iznájar, Priego, Lucena, Carcabuey y Encinas Reales; y los picos de Sierra Nevada, algo difuminados por la falta de nitidez del día.
Volvemos a los repetidores para seguir por la pista; cuando ésta gira, damos vistas al siguiente hito de la jornada, el cerro de las Cruces (1233 msnm), así conocido por tres cruces de madera puestas en su cima, junto a la caseta forestal para vigilancia contra incendios. Para llegar hasta aquí se abandona la pista por una senda que sale a su izquierda, también bastante pronunciada. Desde arriba iniciamos un cresteo de aproximadamente 1.4 kms., sin senda -salvo en algún mínimo trecho-, entre roca caliza, que obliga a estar muy pendiente de donde se pone el pie; en ocasiones conviene desviarse ligeramente a la izquierda en el sentido de la marcha para sortear algunos bloques de roca; tras pasar una vaguada, el último tramo en ascenso es más llevadero (o es que nos hemos hecho ya con el terreno; también ayuda ver la cercanía de la cumbre). Finalmente alcanzamos el vértice geodésico de Sierra Alta (1326 msnm) y aquí nos tomamos un merecido refrigerio, con increíbles vistas de las que ahora sí podemos disfrutar (Sierra Horconera, Gallinera, los Pollos), incluyendo el planeo majestuoso de varios buitres leonados (bajo nosotros!).
Iniciamos el descenso, bastante más sencillo, continuando por una senda (con la ayuda de hitos de piedra), que nos lleva a pasar sobre una alambrada tumbada, que luego repasaremos por una puerta abierta; después la senda, ya muy bien definida, nos lleva por la ladera del pinar, en descenso la mayor parte del trayecto, hasta enlazar con la pista. Ahora la seguimos hacia la izquierda, bajando; este descenso tiene tramos muy empinados, que castigan los cuádriceps, ya no muy finos. En una bifurcación continuamos por la pista de la derecha, hacia Rute, contactando con la CO-8212, por la que andamos unos 700-800 metros antes de entrar en el pueblo; pasamos por el Paseo del Fresno y luego retomamos el Camino de Priego para concluir la ruta.
Partimos desde el área recreativa de Fuente Alta, aparcando junto al Club de Tenis. Aquí se llega tras dejar Rute por la A-3226 (carretera de Priego) y luego seguir a la derecha durante 1 km por el camino de Priego.
Iniciamos la ruta continuando por este camino para visitar las ruinas de Rute el Viejo, fortaleza del siglo XIII del reino nazarí (asentada sobre un núcleo visigodo) de estratégica localización para la vigilancia y defensa de la frontera; esto hizo que desde inicios del siglo XIV, en tiempos de Fernando el Santo, pasase a poder cristiano, pero volviese a cambiar de manos en varias ocasiones hasta su definitiva conquista ya en el siglo XV (reinando Juan II). Poco después se abandonó (por su difícil acceso y el aumento de población -y quizás por estar hecha unos zorros tras tantas vicisitudes) y se fundó el actual Rute, unos 3 kms. al sur. Hoy parece un milagro que se mantenga en pie una de las muchas torres que poseía y algún lienzo de la muralla (de los 240 metros que tuvo), ruinas en medio de un olivar declaradas Bien de Interés Cultural.
Desandamos el camino (nos queda mucha subida como para volver campo a través) hasta el merendero de Fuente Alta, subiendo junto a la cerca de madera, hasta conectar con el camino ancho (esta subida tiene bastante pendiente y piedra suelta, es mejor ir por la senda). Por el camino, rodeados de pino carrasco de repoblación, cómodamente (a diferencia del resto de recorrido) llegamos hasta el refugio ADEBO (Asociación para la Defensa del Borrico), donde numerosos burritos viven tan ricamente a la sombra de los pinos (como en la sevillana).
Luego damos la vuelta para tomar una senda a nuestra derecha, que en acusado y zigzagueante ascenso por el monte Hacho (aliviado por las primeras vistas sobre el embalse de Iznájar, el mayor de Andalucía), nos lleva a su cima; pasados unos repetidores, llegamos a la torre vigía del Canuto, musulmana, también declarada BIC, en restauración. Desde aquí las vistas son impresionantes: el “Lago de Andalucía”, con la Peña de la Camorra, Cuevas de San Marcos, Iznájar, Priego, Lucena, Carcabuey y Encinas Reales; y los picos de Sierra Nevada, algo difuminados por la falta de nitidez del día.
Volvemos a los repetidores para seguir por la pista; cuando ésta gira, damos vistas al siguiente hito de la jornada, el cerro de las Cruces (1233 msnm), así conocido por tres cruces de madera puestas en su cima, junto a la caseta forestal para vigilancia contra incendios. Para llegar hasta aquí se abandona la pista por una senda que sale a su izquierda, también bastante pronunciada. Desde arriba iniciamos un cresteo de aproximadamente 1.4 kms., sin senda -salvo en algún mínimo trecho-, entre roca caliza, que obliga a estar muy pendiente de donde se pone el pie; en ocasiones conviene desviarse ligeramente a la izquierda en el sentido de la marcha para sortear algunos bloques de roca; tras pasar una vaguada, el último tramo en ascenso es más llevadero (o es que nos hemos hecho ya con el terreno; también ayuda ver la cercanía de la cumbre). Finalmente alcanzamos el vértice geodésico de Sierra Alta (1326 msnm) y aquí nos tomamos un merecido refrigerio, con increíbles vistas de las que ahora sí podemos disfrutar (Sierra Horconera, Gallinera, los Pollos), incluyendo el planeo majestuoso de varios buitres leonados (bajo nosotros!).
Iniciamos el descenso, bastante más sencillo, continuando por una senda (con la ayuda de hitos de piedra), que nos lleva a pasar sobre una alambrada tumbada, que luego repasaremos por una puerta abierta; después la senda, ya muy bien definida, nos lleva por la ladera del pinar, en descenso la mayor parte del trayecto, hasta enlazar con la pista. Ahora la seguimos hacia la izquierda, bajando; este descenso tiene tramos muy empinados, que castigan los cuádriceps, ya no muy finos. En una bifurcación continuamos por la pista de la derecha, hacia Rute, contactando con la CO-8212, por la que andamos unos 700-800 metros antes de entrar en el pueblo; pasamos por el Paseo del Fresno y luego retomamos el Camino de Priego para concluir la ruta.
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Easy to follow
Scenery
Difficult
Excelente relato, perfectamente explicada.
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Easy to follow
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Moderate
Magnifica descripción