Ruta Vicentina: 3, de Almograve a Zambujeira do Mar

En la primera semana de diciembre de 2019, ASM (Agrupación de Senderistas y Montañeros de la Región de Murcia) ha realizado su tradicional actividad de un GR. En esta ocasión se eligió la Ruta Vicentina, en el suroeste portugués, que aunque no es oficialmente un GR si es una larga ruta, señalizada con marcas verdes y azules.. Estos traks son el resultado de dicha actividad. Como en otras ocasiones hemos tenido el apoyo de dos furgonetas para desplazarnos al inicio y recogernos al final de cada una de las etapas que hemos realizado, por lo que notaréis algunas lagunas en el recorrido, ya que algunos tramos, por diversas circunstancias no se han realizado. En total utilizamos 7 días para recorrer desde Porto Covo, cercas de Sines hasta el Cabo San Vicentes, teniendo los primeros días el alojamientos en Vila Nova de milfontes y los últimos en Aljezur

Ruta Vicentina: 3, de Almograve a Zambujeira do Mar
El tercer dia, con las furgos nos dirigimos al aparcamiento de la playa de Almograve. Una vez en dicho aparcamiento debemos continuar por la izquierda, pero nos vamos hacia la derecha para intentar ver la desembocadura del barranco y los pliegues. Llegamos hasta el extremo, con buenas vistas sobre el final de la etapa de ayer en la denominada playa de Nossa. Volvemos al aparcamiento he iniciamos la marcha hacia el sur, al principio todos por la playa, pero enseguida nos dividimos en dos grupos, unos pocos continúan por la playa, el resto nos subimos al acantilado y avanzamos, un buen trecho, por el camino que lo recorre, con dunas fijas y semimóviles a nuestra izquierda y el acantilado a la derecha. Al altura de la playa da barca grande, cuando el camino comienza a bajar hacia el puerto de pesca de lapa de bomba, dejamos el camino, y continuamos por una senda que sale por nuestra izquierda, y que discurre sobre las dunas fijadas, pero con arena suelta que dificulta el avance. En esta zona el acantilado es espectacular con salientes solitarios, con nidos de cigüeñas en algunos de ellos. A veces la senda se incorpora a algún camino que viene desde el interior, que luego desaparece, y continúa la senda, pero el recorrido no tiene pérdida, siempre próximo al acantilado, aunque algún tramo se aleja un poco, pero en unas decenas de metros vuelve hacia el acantilado. Al llegar a la altura de Cavaleiro, aprovechando que un barranco erosiona el acantilado y existe un gran desnivel, el sendero continua por un camino que nos adentra hasta la población, y volvemos hacia el acantilado por el camino del Faro Sardâo, pero aunque se puede continuar por el camino asfaltado, el sendero se desvía por la derecha, por un camino de tierra, y al llegar al acantilado gira a la izquierda, bordeando el faro y continuando hacia el sur. En esta zona hay una verdadera maraña de senderos, podemos coger varios de ellos, pero siempre en dirección sur. Al final todos confluyen en un camino ancho, por donde continúa nuestra ruta. La disposición de los estratos hace que en este tramo no existan tantos entrantes y salientes como en el tramo anterior a Cavaleiro, pero sigue siendo espectacular por la altura y los colores y formas de las rocas.
Al llegar a la altura de la Playa (Praia) do Tornel, el sendero da un giro de 90 grados hacia el oeste (derecha), para al poco, girar nuevamente hacia la izquierda en dirección al puerto, cuidado ya que el camino se va por la izquierda y el sendero sigue recto entre el matorral y la señalización es escasa y podemos equivocarnos. Tras una bajada pronunciada, con escaleras de madera incluida, llegamos al puerto de Sacas de Barcas. Ahora tendremos una subida pronunciada por asfalto y llegaremos al poblado pesquero y,ya por el camino peatonal, junto a la carretera nos dirigiremos hacia Zambujeira, pero antes de llegar a la población, tomamos una pasarela a la derecha que nos acerca al acantilado de la Praia de Nossa Senhora y por senda, arenosa para variar, llegaremos a Zambujeira, donde nos espera el Tito para la comida, que como acaba tardes, nos vamos a la plaza del pueblo a ver la puesta de sol.