Ruta IX Hinojosa del Duque

Durante nuestro camino, podremos visualizar parte del típico paisaje del Valle de los Pedroches: dehesas de encinas centenarias y extensos campos de cultivo. Una vez recorrido unos 2400 metros llegaremos hasta el Arroyo de las Viñas, de curso intermitente y que no nos supondrá ningún tipo de problema a la hora de seguir nuestro camino. A 600 metros del río nos encontraremos con un cambio brusco de dirección hacia la izquierda, el cual tomaremos. Seguiremos caminando unos 350 metros hasta encontrarnos con otro cambio de dirección, pero esta vez hacia la derecha, por donde seguiremos 2 kms más hasta llegar a un último desvío que tomaremos a la izquierda durante 500 metros, habiendo llegado a nuestro punto intermedio de ruta, el Cerro del Cohete, un lugar peculiar, cargado de historia y con un ecosistema característico.
Además del paisaje y todo lo que nos ofrece la naturaleza propia de la zona, durante en recorrido de esta ruta podremos ser testigos de los restos de la historia reciente de nuestro país: las trincheras de la guerra civil. Recordemos que estos restos están bajo la protección de la Declaración genérica del Decreto de 22 de abril de 1949, y la Ley 16/1985 sobre el Patrimonio Histórico Español. Por otro lado, en el Cerro del Cohete se localiza lo que generalmente se ha llamado el Castillo del Cohete. Se trata de una serie de restos de muros sobre la roca donde se distingue una doble muralla construida con bloques regulares de piedra. Continuaremos la marcha, y, a 200 metros volveremos a encontrarnos con una nueva bifurcación, donde tomaremos el camino de la derecha. En nuestro caminar a través de campos de cultivo y pastizales, estaremos ya, plenamente situados, en la Cañada Real de la Mesta, una importante vía pecuaria que une la Comarca de los Pedroches con el norte y el sur, y que, en Hinojosa del Duque inicia uno de sus tramos.
Es una ruta recomendable para hacer durante los meses frescos y lluviosos de otoño ya que nos permitirá disfrutar de los verdes y densos campos de cultivo y encinar, así como hacer disfrutar a los amantes de la naturaleza y la ornitología con la presencia de grandes bandadas de grullas. Es buena opción para hacer durante los meses de primavera y como ruta nocturna durante las noches de cielo estrellado de verano.