Ruta del Rudrón: Basconcillos del Tozo – Barrio Panizares – Hoyos del Tozo – San Andrés de Montearados – Ceniceros ---- (Par

Comienza la ruta en Basconcillos del Tozo donde se encuentra el sumidero de las aguas del Rudrón, “Cueva del Agua”.

Una corta brecha/canal entre las paredes, en fácil trepada da acceso a los terrenos de la parte superior.

Por terreno fácil y tras cruzar la carretera a Barrio Panizares, se llega al arco de roca “Puente del Diablo”.

En la parte inferior se halla la “resurgencia del río Rudrón” a la que se puede descender por terreno de acusada pendiente y sin senda definida. En nuestro caso intentaremos acercarnos al regreso.

Siguiendo una estrecha senda sobre la ladera en dirección a Barrio Panizares se llega a la carretera. Momentáneamente se puede evitar pisar sobre el asfalto por una senda próxima a la misma hasta que ya no queda más remedio que continuar por la misma carretera hasta llegar a Barrio Panizares.

En esta localidad, el arroyo Fuentes aporta su caudal al Rudrón que en esta época lo vemos ya con animada corriente la cual irá incrementándose con nuevas aportaciones en su curso según iremos viendo sobre la marcha.

Dejando atrás Barrio, tomamos el camino hacia Hoyos del Tozo al que llegamos descendiendo la senda señalizada.

En Hoyos del Tozo se puede contemplar la cascada “La Coladera” así como también la ermita de Sta. María.

A la salida de Hoyos, aunque larga, resulta entretenida la senda siguiendo el curso del Rudrón que se abre paso entre sorprendentes acantilados. Se van dejando atrás algunos restos de antiguos molinos. También sorprende la “Fuentona” con abundante caudal que surge de la roca.

Llegando a la altura de la ubicación del molino “Rasgabragas” obviamos una indicación por cuya senda se podría llegar al pueblo abandonado de Ceniceros. Nuestro planteamiento aún nos lleva a seguir un poco más aguas abajo del Rudrón.

En la confluencia con el valle de Celadilla discurre la carretera que sube a San Andrés de Montearados. En el otro sentido siguiendo el Rudrón, en aproximadamente 1.300 metros se llegaría a Moradillo del Castillo cuya visita descartamos pues sería un ida y vuelta que llegaría a incrementar el ya de por sí largo itinerario de nuestra ruta de hoy.

No queda otra opción que caminar sobre el asfalto por espacio de 2 kms largos hasta San Andrés. Habríamos evitado la carretera si anteriormente hubiéramos tomado la senda señalizada por la que se accede directamente a Ceniceros.

En San Andrés de Montearados tomamos el camino que en ascenso llega a Ceniceros, lugar que en el pasado lejano pudo albergar algunas familias. Actualmente no tiene ningún atractivo pues la densa vegetación apenas deja ver algunos de los escasos restos de ruina que quedan.

Estamos ya de regreso hacia Barrio Panizares por el camino que discurre por la parte alta de los farallones de las Hoces del Rudrón. Se llega a pasar junto a “La Curacada”, formación con arco de roca y cueva a la que nos acercamos para observar.

El camino nos acerca a Hoyos del Tozo pero no hay necesidad de bajar de nuevo al pueblo por donde habíamos pasado a primera hora, continuando por el camino conocido hasta entrar nuevamente en Barrio Panizares.

En el regreso al punto de partida tenemos curiosidad por llegar y observar la “Fuente del Hoyo” por donde deben de reaparecer las aguas del Rudrón anteriormente filtradas en la “Cueva del Agua” que veíamos al comienzo de nuestra ruta.
El acceso obligaría a pasar junto al molino. Pero tenemos oído (leído) que siendo espacio privado no se puede pasar por esta propiedad. Probamos suerte y si fuera necesario pediríamos permiso. Sin embargo no se aprecia ni ocupación ni impedimento físico que nos corte el paso entre los edificios y terrenos circundantes.

Para acercarnos a la cueva/surgencia no vemos senda definida. En el entorno de la cueva hay densa vegetación y no llegamos a apreciar salida de agua que posiblemente aparecerá parte abajo del cauce. Probablemente con mayor caudal se podría ver caer en cascada desde la cueva.

Sin senda definida obliga remontar la empinada ladera hasta alcanzar nuevamente el “Puente del Diablo”.

Una senda a lo largo de la dolina inmediata nos conduce al extremo opuesto donde se encuentra la “Cueva del Moro” pudiendo observar ligeramente el interior de la cavidad.

Completamos el recorrido destrepando la canal para situarnos junto a la “Cueva del Agua” y ya dar por finalizada esta ruta que ha resultado sumamente interesante.



Registros del GPS:
Distancia total recorrida: 27,14 kms
Desnivel acumulado de subida: 737 metros
Tiempo total dedicado a la ruta: 8 horas incluidos algunos breves “tiempos muertos”
Exigencia física: Alta.
Dificultad : La ruta en sí no tiene dificultades. Sí hay que tener en cuenta el largo recorrido y horario que requiere en este caso.