RUTA DEL INCENDIO

Ruta desde Santander pasando por:
- Monumento al Incendio de Santander (0.3 km)
- Iglesia de los Jesuitas (1.1 km)
- Catedral de Santander (1.5 km)

Te proponemos conocer el Santander de 1941 a través de una ruta cultural y turística en la ciudad: la Ruta del Incendio.

Conoce a través de unos tótems instalados en las calles de la ciudad: cómo eran antiguamente, cómo afectó el Incendio y cómo son ahora.

El primer punto de interés es la Calle Cádiz, donde se inició el famoso incendio. Es el corazón de la bahía, allí se encontraban el asentamiento romano de Portus Victoriae y el castillo de Somorrostro. Las pruebas de que el suelo que pisas era portuario están en el Centro de Interpretación de los Antiguos Muelles. Reconstruida y revitalizada, hoy se trata de una de las zonas más animadas, inmersa en el Anillo Cultural y, como siempre, viviendo de cara al mar.

El siguiente punto de interés en este paseo cultural es la Plaza Machichaco. Allí se encuentra el Monumento a las Víctimas de la Explosión del Cabo Machichaco, el barco que llegó con una carga clandestina de dinamita en su bodega en 1893.

Siguiendo los tótems llegaríamos al Centro Botín uno de los edificios más emblemáticos de la ciudad donde podrás disfrutar no solo de una amplia oferta cultural, sino también de unas vistas privilegiadas de la bahía de Santander.

Avanzamos hacia la plaza de Alfonso XIII, a medio camino nos encontramos con el Banco de España, en este lugar existió un castillo de la época del rey Alfonso VIII que pervive hasta el siglo XX con numerosos cambios. En ese mismo siglo se construye el edificio conocido como Banco de España.

Adentrándonos en los Jardines de Pereda, encontraremos el siguiente tótem de esta ruta. Estos jardines inaugurados en 1905 con el nombre de Jardines del Muelle, pasaron a llamarse Jardines de Pereda en 1911, al colocarse el monumento del escritor cántabro José María de Pereda.

Nuestra siguiente parada es la calle San José, otra de las afectadas por este incendio tan catastrófico, al igual que la Calle Puente.

La Plaza de Atarazanas, situada a los pies de La Catedral, en el s. XV fue zona de astilleros, ya que hasta aquí llegaba el mar.

Nuestras dos últimas paradas son la calle Lealtad y Juan de Herrera dos de las más transitadas por los santanderinos gracias a su variada oferta comercial.