RUTA DE YERNES AL PICU BUEY MUERTO; CUEVA LLAGAR Y EL PICU LORAL

YERNES/ARRROYO DE LA TRAPA/LA COLLADA/PICU BUEY MUERTO/MIRADORIU/BRAÑAS NEGRAS/LAS SIETES FUENTES/FUENTE CIMERA/CUEVA LLAGAR/LLANECES/LA CADAVINA/PICU LORAL/FONCUAYA/SERNA/CUEVA LLAGON/YERNES: salimos del pueblo por la senda que marca a la izq del área de la Reguera, un camino ganadero sin mucha dificultad nos lleva al arroyo de la Trapa donde pasaremos la primera portilla y un decrepito puente, aquí cambiamos totalmente nuestra orientación hacia la izq y subiremos por la ladera hasta la segunda portilla, donde comienza una bajada que nos enlaza con el camino que viene de la carretera, observamos a nuestra izq la tercera portilla (que no traspasamos) y tomamos a la derecha una empedrada cuesta (la zona más complicada del trazado), a pocos metros encontramos en plena subida la cuarta portilla. Esta parte del camino es muy complicada por su trazado y sobre todo si el terreno esta mojado, no es aconsejable hacerlo en sentido descendente. A partir del siguiente puente, la subida es más sencilla, hasta llegar a la Collada. Aquí nos desviamos a la izq hacia la cima del Buey Muerto. Regresamos nuevamente a la Collada y retomamos la pista hacia el Aula de la Naturaleza y Brañas Negras. El trazado nos asciende por una buena calzada al cruce en En Siete Fuentes, desde aquí continuaremos por la pista hacia la izq, hasta la majada de Cueva Llagar, en el centro de la misma, desviaremos el rumbo subiendo a la derecha por la calzada que pasa por el bebedero de Llaneces y llega al collado de la Cadavina, donde giramos nuevamente a la derecha para ascender por la loma sin dificultad hasta la cima del Loral. Desde aquí las vistas son impresionantes (siempre que el día acompañe). El descenso al collado de Foncuaya lo tomaremos con orientación oeste, al lado del monolito de la vuelta ciclista comenzaremos a transitar siempre cerca de la pista o por la misma, hasta las cabañas de La Serna, donde podemos dejarnos bajar por la carretera (que no es mucho el rodeo) o desviarnos a la derecha por el viejo camino (menos transitable y algo embarrado), para enlazar con la pista, una vez atravesada la quinta portilla en Cueva LLagon a un kilometro del pueblo.
La ruta se encuentra medianamente señalizada y sin muchas dificultades siempre que lo climatológico nos respete. Es una ruta que merece la pena realizar por sus paisajes y sus impresionantes vistas.