RUTA DE LA AMOLADORA Y MONTEFRÍO

RUTAS VII ENCUENTRO REGIONAL CAMINERO - BELMIRA

RUTA DE LA AMOLADORA Y MONTEFRÍO

GRADO DE DIFICULTAD (1 a 5): MEDIO (3, Opcional 4 hasta cuchilla de Montefrío)
DISTANCIA: 12 km (17 km hasta Montefrío)
DURACIÓN: 6 horas
ATRACTIVOS: Caminos de arriería, paisajes culturales agropecuarios, piscicultura, contacto con las tradiciones, patrimonio y cultura de la comunidad en la vereda La Amoladora, miradores del valle del río Chico y cañón de Occidente (río Cauca en la ruta hasta Montefrío), piscinas naturales en quebradas rodeadas de bosque nativo con abundantes robledales, abundantes vallados y haciendas patrimoniales, reserva de Montefrío.

SINOPSIS
La ruta tiene una longitud de 11 km hasta la vereda la Amoladora, pero 17 hasta la reserva de Montefrío, la cual está siendo protegida por las entidades ambientales de la región por su valiosa riqueza natural.
La actividad de senderismo inicia cerca a la entrada a la vereda la Amoladora, donde tomamos un sendero siguiendo la quebrada La Amoladora u opcionalmente un carreteable veredal hacia la Escuela de esta vereda. Siguiendo el camino maravilloso que bordea la quebrada, acompañados principalmente del sonido de la quebrada, peñascos verticales con abundante vegetación y aguas rojizas y cristalinas, llegaremos a unos vallados en forma circular del cual algunos habitantes dicen que por su antigüedad y configuración podrían ser vestigios de asentamientos prehispánicos, pero hay fuertes huellas de un proceso de minería que configuró un paisaje de vallados y apilonamientos de piedras alrededor de la quebrada además de su afectación, sobretodo en los lugares donde su cuenca es amplia. Después de estos vallados, seguimos un relicto de camino para llegar a la finca de la familia Osorno, una finca empedrada rodeada de hermosos vallados y en tapia que pudiera ser un referente de la majestuosidad y poderío de la región en el siglo XIX por la explotación del oro y de los bosques de roble. Seguiremos la quebrada Zafra disfrutando del paisaje lechero que lo conforman los potreros sembrados con pasto kikuyo y el ganado principalmente de la Raza Holstein (de alta producción lechera). Llegaremos de esta manera a una truchera donde podremos conocer de primera mano el manejo de la piscicultura. Seguiremos la quebrada Zafra por algunos potreros y senderos para llegar al piedemonte de la reserva de Montefrío donde podremos entrar a un bosque encantado alrededor de la quebrada, lleno de robledales, con aguas granates impregnadas del olor y color de las hojas del roble, varias cascadas, y con una sinfonía de pájaros y del agua en su eterno juego y danza con las rocas. Será la ocasión para fundirnos con el agua y la naturaleza, hacer una vigilia de la palabra, desconectarnos del reino de dispositivos electrónicos, y sentirnos una vez más como seres únicos en el universo conectados a estos hermosos ecosistemas, los cuales destruimos día a día por una concepción errada del progreso y la civilización.

Después de este proceso de sanación y meditación en medio de este hermoso bosque, visitaremos varias fincas de la comunidad, donde escucharemos la historia de la vereda y disfrutaremos del patrimonio gastronómico de la región, especialmente en la finca de Don Pedro Londoño podremos observar sus manos callosas y gruesas las cuales transformaron los bosques de roble en carbón, y después, en paisajes lecheros. También visitaremos la nueva capilla y escuela de la vereda y después regresaremos por un camino alterno hasta la vía principal, cerca al lugar de partida.

Esta ruta, fue antiguamente un camino real que era continuación del que proviene de la vereda Zafra y conectaba Entrerríos y Sopetrán, tiene la opción de subir hacia la reserva de Montefrío, un lugar que por su gran riqueza en recursos naturales, principalmente el agua, varias instituciones están empeñadas en conservar, por esto se aconseja subir con un grupo pequeño de personas, lo cual es recomendado debido a su baja capacidad de carga, en esta continuación del camino encontraremos unos vallados que nos indican la división territorial de los municipios de San Pedro y Belmira, hasta llegar al denominado Mirador Natural del Norte, donde observamos los territorios del altiplano de los Osos, sigue el camino por un sendero amplio hacia la parte más conservada de la Reserva Natural Regional de Montefrío, ascendiendo a una altitud máxima de 3050 msnm, donde se pueden apreciar especies como robledales, arrayanes, encenillos, espaderos, amarrabollos, chagualos, carboneros, uvito de monte, dulomocos entre otras, además se puede observar el Bosque de Niebla o Bosques Musgosos los cuales albergan gran cantidad de plantas epifitas como bromelias y orquídeas, todas estas especies, y en general el bosque, son reguladores hídricos, luego llegamos al Mirador del Cañon de Occidente o del río Cauca donde está un maravilloso mirador del mayor parte del occidente y norte de Antioquia.

Este camino, igual que los otros caminos que cruzan el río Chico en dirección hacia Sopetrán y Santa Fe de Antioquia, fueron de gran importancia durante la época de la colonia principalmente por la explotación de oro, luego fue transitado por los arrieros con sus recuas de mulas, haciendo un Intercambio comercial de productos de los diferentes pisos térmicos, por el también transitaron las famosas mujeres llamadas Quesiteras, la cual transportaban productos en unos canastos llamados Cuyabras sobre sus cabezas, de la tierra fría transportaban productos lácteos como quesos y de la tierra caliente las callanas ( recipiente de arcilla cocido utilizado para asar arepas ) estos lo adquirían a los indígenas de la etnia de los Catíos