Ruta circular al Barranco del Infierno por la rambla de Librilla desde el Trasvase.

Clásica ruta para visitar el barranco del infierno.
Yo tengo la costumbre de iniciarla en el trasvase, desde donde bajamos a la Rambla de Librilla o del Río Orón. Ya en el cauce solo hay que subir aguas arriba buscando la senda más clara, sobre todo cuando baja un pequeño caudal de agua. aunque en el día de hoy prácticamente venia seca.
Llegamos a la Pista del Castellar, superamos la pequeña presa por la margen derecha y continuamos subiendo por el margén izquierdo, aunque más adelante iremos buscando la senda más clara. Al llegar al cruce con el barranco del Infierno, dejamos la rambla de Librilla y nos adentramos en dicho barranco, superando por el margén derecho una de las presas de laminación construidas en el barranco.
Cuando el barranco da un giro a la izquierda nos adentramos en la zona más llamativa de dicho barranco. Primero pasamos por una zona de margas, depositadas en el fondo de un mar terciario, que se encuentra fracturadas por diaclasas que ha facilitado la acción erosiva de las aguas de lluvia y el viento, que han dando lugar a una excepcional morfología, con tubos de órganos, chimeneas de bruja.... proseguimos y atravesamos un paquete de yeso, formado por finas capas de yeso cristalino, algunas de ellas son ciertos pliegues sinsedimentarios, posiblemente por efecto de algunos movimientos sísmicos.
Tras atravesar este tramo continuamos por el barranco, aguas arriba, hasta llegar a un barranquillo lateral, donde por acción de los "moteros" se ha originado una traza, inexistente hace unos 10 años, por donde podemos subir hasta la casa forestal de Ballesteros (también se puede elegir este punto como inicio de la ruta).
Sin llegar a la casa, nos vamos por la derecha buscando una senda que nos lleva a la zona alta de la loma, sobre el barranco del infierno, donde disfrutamos de excelentes vistas de todo el paisaje de los barrancos de Gebas o de Fuente Librilla.
Volvemos sobre nuestros pasos y buscamos, por un tramo campo a través, la pista del Castellar que nos baja de nuevo al cauce de la Rambla de Librilla.
Uno de nosotros proponer hacer una exploración de la rambla lateral por donde baja la pista y, como vamos bien de tiempo, hacemos un pequeño recorrido por este cauce pasando bajo el acueducto que llevaba el agua salada hasta las salinas existentes un poco más abajo, en la margen izquierda de la rambla, hoy casi totalmente desaparecidas.
Tras realizar este tramo, totalmente opcional, volvemos a la rambla de Librilla y bajamos hasta nuevamente encontrarnos con los tubos del sifón del trasvase, done subimos y damos por finalizada la ruta.